
El Ministerio de Hacienda ha dado por fin luz verde al pago del 0,5% adicional prometido a los empleados públicos, el cual estaba pendiente de 2024. De esta forma, más de tres millones de funcionarios verán reflejada en la nómina de julio una subida que incluye atrasos desde el 1 de enero de año pasado, aunque advierten de que no todos la cobrarán de manera automática. Es decir, que los que hayan cambiado de destino o dejado el servicio deberán solicitarlo y, en algunos casos, reclamarlo expresamente.
La resolución publicada este jueves en el BOE (que se puede consultar en este Boletín Oficial del Estado) da las instrucciones para que la subida llegue este mes a la nómina de los funcionarios, aunque advierte de que los pagos podrían retrasarse si existen problemas técnicos (algo que ya ocurrió con anteriores subidas). Para los que han cambiado de destino, han pasado a otra administración o han perdido la condición de empleado público en el periodo afectado, el cobro no será de oficio, es decir, que Hacienda no lo pagará automáticamente, por lo que tendrán que pedirlo al organismo donde trabajaron o, si han fallecido, podrán reclamarlo los herederos.
Así, en la nómina de enero, los más de tres millones de funcionarios recibirán una especie de pequeña “paga extra” en la nómina de julio cobrando los atrasos pendientes desde el 1 de enero de 2024 y que será permanente al salario base. Ahora, hay que decir que el texto del BOE detalla un enjambre burocrático para gestionar los pagos de altos cargos, personal directivo y personal laboral, dependiendo de si su convenio lo autoriza o no.
La subida afectará no solo a los funcionarios del Estado, sino también de comunidades autónomas y ayuntamientos. Ahora, desde el Ministerio de Hacienda siguen sin dar una cifra oficial del coste real para las arcas públicas, a pesar de la dimensión del desembolso.
Una subida para no perder poder adquisitivo
El origen de la subida está en el acuerdo firmado entre el Gobierno y los sindicatos CCOO y UGT, que fijaba una subida del 2% en 2024, más este 0,5% extra si la inflación superaba los incrementos pactados en el trienio. Los datos del INE no dejan lugar a dudas, ya que el IPC armonizado de 2022, 2023 y 2024 suma un 11,6%, frente al 8% de subidas salariales previstas, activando así el pago adicional.
De esta forma el resultado final es que el sueldo de los funcionarios subió un 3,5% en 2022, un 3,5% en 2023 y 2,5% en 2024 más el 0,5% que acabamos de decir y que esta confirmado. En total, los funcionarios han notado una subida del 9,8% en tres años.
Pese al triunfalismo oficial, la realidad es que miles de empleados públicos tendrán que presentar la solicitud para no quedarse fuera de este reparto, un trámite que en la práctica podría demorar el cobro real de los atrasos hasta después del verano.