El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha sufrido recientemente cambios tras la aprobación de la reforma de los subsidios por desempleo. La mayor parte de sus beneficiarios reciben el subsidio para mayores de 52 años, más de 700.000, y precisamente es el único que no ha sufrido ninguna modificación. ¿Es el más perjudicado tras la reforma de Yolanda Díaz?
Ante esta pregunta, desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social, aseguran que esta ayuda asistencial para desempleados mayores de 52 años sigue manteniendo las ventajas principales frente al resto. Es decir, es el único que sigue cotizando para la pensión de jubilación y es el único con la duración más alta: se agota al encontrar un nuevo empleo o al alcanzar la edad de jubilación.
La duda surge a raíz de conocerse que es el único que no experimentará un incremento en la cuantía a partir del 1 de noviembre de 2024. El resto de estas ayudas sí que subirán en el primer año: 570 euros, los seis primeros meses, y en 540 euros al mes, los 180 días posteriores.
¿Es el subsidio para mayores de 52 años el más perjudicado por la reforma?
No, no es el más afectado. Es más, podría decirse que es aquel en el que los beneficiarios han obtenido mayores beneficios. Comenzando porque es el único que sigue cotizando para la pensión de jubilación por el 125% de la base mínima de cotización vigente en cada momento.
Hay que mencionar que en la anterior reforma, ahora derogada, se preveía aprobar un sistema en el que se reducía el porcentaje de cotización por cada año de disfrute, hasta fijarlo en el 100% en 2028. Y esto ya no va a ocurrir.
Al mismo tiempo, es el único que no cambia la duración y cuantía; y tampoco se han introducido modificaciones de los requisitos exigidos para su acceso.
Otras ventajas de cobrar el subsidio para mayores de 52 años
Entre las novedades que afectan al subsidio para mayores de 52 años y que ofrecen una ventaja para los desempleados es que se elimina el mes de espera para su solicitud y cabe la posibilidad de compatibilizarlo con un empleo.
A partir del 1 de noviembre, todos aquellos que cobren el subsidio para mayores de 52 años tras haber agotado la prestación contributiva por desempleo (el paro) no tendrán que esperar un mes entre que se finaliza una prestación y se solicita el subsidio. A partir del día siguiente de agotar el paro, se abre un periodo de 15 días hábiles para solicitarlo.
Por último, se introduce una novedad. Como el fin de estas ayudas es regresar al mercado laboral con la mayore brevedad posible, es posible compatibilizarlo con un empleo durante los seis primeros meses.
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