Una pareja compra una casa que resulta tener grietas ocultas y goteras y el vendedor tiene que indemnizarles con 80.000 euros

Comprar la casa ideal es el sueño de muchos, una gran inversión en la que se pone mucha ilusión con la idea de crear un nuevo hogar. Pero esta decisión puede convertirse en una pesadilla para algunos, como para esta pareja que después de encontrar y adquirir la casa de sus sueños descubrió que tenía grietas que el vendedor había tratado de ocultarles. 

Según la información publicada por el medio francés ‘Le Figaro’, esta pareja de jóvenes quedaron prendados de una casa de 100 metros con jardín que “parecía impecable, cuidadosamente renovado”, a la que planeaban mudarse junto a sus dos hijos. 

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Decidieron comprarla, invirtiendo para ello 600.000 euros en la operación, para que, unas semanas después de mudarse, comenzase su pesadilla tras unas fuertes tormentas en la zona en la que estaba ubicada la casa.  

Tras las lluvias comenzaron a aparecer grietas en las paredes

Después de las lluvias, la pareja comenzó a notar problemas en la estructura de la vivienda, entre ellas filtraciones de agua y grietas en las paredes. Por este motivo contactaron con un experto que les confirmó que las grietas habían sido ocultadas “por una simple capa de pintura aplicada antes de la venta, se debían a una profunda inestabilidad en los cimientos”. 

Las filtraciones de agua que tenía la vivienda fueron provocadas por el mal estado en el que se encontraba el tejado de la casa que había sido “cubierto apresuradamente con materiales de baja calidad para disimular sus defectos”. 

Además, se encontraron defectos en la instalación eléctrica de la casa, que debía ser reciente, según las facturas que había aportado el vendedor de que la misma era reciente, pero que el experto confirmó que “resultó ser anticuada y peligrosa, representando un riesgo real para los ocupantes”. 

Todo esto apuntaba a que el vendedor ocultó todos estos problemas de la casa para poder cerrar la operación de venta, y el arreglo costaría a sus nuevos propietarios 50.000 euros adicionales, según el presupuesto que les habían adelantado. 

La ex notaria y fundadora de una plataforma legal, Coralie Daven, explica al medio francés que “en este tipo de litigios, la responsabilidad por los vicios ocultos recae en el vendedor, siempre que estos vicios no sean aparentes y no puedan detectarse en una visita estándar”.

Con los informes de los expertos y los testimonios de los obreros que realizaron las reformas previas a la venta, la pareja consiguió reunir las pruebas suficientes para demostrar la ocultación de vicios ocultos de la vivienda. 

Tras meses de negociaciones y sin necesidad de llegar a los tribunales, la pareja consiguió a llegar a un acuerdo con el vendedor de la casa que les pagará 80.000 euros. 50.000 de ellos para cubrir el importe de las reparaciones y 30.000 euros en concepto de indemnización por daños y perjuicios.