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La conciliación en España: “hay niños que van al cole con chutes de paracetamol y las madres rezando para que no les dé fiebre otra vez”

Esta madre de dos hijos ha expuesto el drama de muchas familias que no pueden permitirse faltar al trabajo y no tienen con quién dejar a los niños enfermos, exponiendo que no tienen opción.


Evea Egea, en un vídeo compartido en su TikTok
Evea Egea, en un vídeo compartido en su TikTok |Tiktok '@evaegru'
Esperanza Murcia
Fecha de actualización:

La conciliación sigue siendo una asignatura pendiente en España. En una encuesta reciente de ‘The Friendly Companies’, el 94% de los participantes sostenía que las empresas españolas no están suficientemente comprometidas con la conciliación. Una carencia que, especialmente, sufren las mujeres. A pesar de los avances de los últimos años, estás siguen asumiendo la mayor parte de los cuidados, como reflejaba también el mismo estudio: casi el 80% de las encuestadas afirmaban asumir mayor carga de trabajo con los hijos que sus parejas. 

En este contexto, ha suscitado un gran debate la reflexión de Eva Egea, madre de dos hijos, en un vídeo de su cuenta de TikTok (@evaegru), donde ha puesto en el foco el problema que sufren muchas mujeres que trabajan, no pueden prescindir de su empleo y no tienen a nadie con quién dejar a sus hijos: “Hay niños que van al cole con chutes de paracetamol y las madres rezando para que por favor no les dé fiebre otra vez. Y no porque seamos frías o no queramos a nuestros hijos, ni mucho menos, sino porque a veces no queda opción”.

Es una realidad con la que muchas madres pueden sentirse identificadas y a la que ha querido dar voz: “Todas mataríamos por poder quedarnos con nuestros hijos cuando están malos, porque lo único que quieren al final es a mamá. O sea, ellos te lo están pidiendo. Pero la conciliación no es una realidad. En España no existe y es súper injusto. Ya no solo para la madre, sino para esa persona que está creciendo, necesitando de una madre y que no puede estar por trabajar”, relatando el “drama” que viven muchos trabajadores en España por la falta de políticas de conciliación. 

Un relato que, no obstante, suscitó todo tipo de comentarios, hasta el punto de que realizó un segundo video para reflejar la poca conciencia que existe precisamente actualmente sobre esta falta de conciliación laboral y familiar. 

“Falta mucha empatía y concienciación realmente de que la conciliación es nula”

El anterior video cosechó más de 1.000 comentarios, leyéndose en muchos de ellos que había que dejar de trabajar aunque esto supusiera una pérdida salarial, o que la maternidad es algo que se puede planear y hay que estar preparados para este tipo de situaciones. Comentarios que motivaron a Egea a realizar un segundo vídeo contestado al mismo: “debería considerarse un experimento social de lo poco conscientes que somos de la poca conciliación que hay. Porque madres juzgándose entre madres, preguntando que el padre dónde está, como si el padre estuviera fuera a cambiar algo. Si ambos tienen trabajo, el problema sigue estando. ¿Quién pide vacaciones? ¿Tú? ¿Yo? ¿Cuántas has pedido ya? En verano, en agosto, ¿cómo lo haremos? ¿De dónde sacamos el tiempo matemáticamente?”, comienza explicando.

A esto, volviendo al caso de cuando los hijos enferman, añade que “un niño, cuando está malo, no está malo unas horas, puede estar una semana entera para que esté 100% recuperado, sin toser, sin mocos y sin nada” por lo que cree que “falta mucha empatía y concienciación realmente de que la conciliación es nula”. En este sentido, agrega “que una mujer o un padre para faltar al trabajo un día entero porque un hijo no se recupera en unas horas, igual son 50 euros menos del sueldo que no se pueden permitir y, si son varios días, va a aumentando”.

Además, critica que son muchas las personas que dicen “contratar una canguro”, exponiendo que “no sé qué clase de hijos tenéis”, pero que no es tan fácil decirle a un niño o niña de un año y medio que una persona que no conoce va a venir a cuidarle mientras sus padres se van a trabajar (además de que su contratación también implica un coste de dinero). Frente a este contexto, aclara que ella ha tenido la “grandísima suerte” de poder conciliar, pero que para la mayoría de personas es imposible y se ven obligados por ello a llevar a sus hijos malos al cole.

Sobre esto, reitera que ella, que cuando su hijo tose “lo encierra en casa”, no critica  a las personas que por fuerza mayor, y que “no tienen familia ni absolutamente nada”, llevan a sus hijos malos al colegio aunque puedan contagiar a su hijo, porque “es lo que hay”.  “Se puede contagiar en el parque, en el parque de bolas, en la calle, cuando se junte con otro y le tosa”, concluye.