La jefa de personal de un supermercado de la cadena Leclerc en Francia fue despedida tras descubrirse que mantenía una relación con uno de los altos cargos de la compañía. El Tribunal de Casación, la Justicia francesa, ha declarado el despido como improcedente defendiendo así el derecho a la privacidad en el trabajo y anulando la “falta grave” que se presuponía en la carta de despido.
Uno de los motivos por los que esta sentencia ha tenido tanta repercusión es porque como informa Le Figaro, el hombre ya estaba casado con una persona que también tenía un cargo de responsabilidad en la empresa. Aunque cuando se conoció esta información, la empleada fue despedida inmediatamente ahora la empresa tendrá que pagarle 20.000 euros por daños y perjuicios así como una indemnización por preaviso, las vacaciones y los daños morales.
La trabajadora afectada comenzó en esta cadena de supermercados, una de las más conocidas en Francia, cuando tenía 25 años, en 2018. Cuando sólo llevaba 9 meses de trabajo, fue apartada de su puesto por una lista de faltas graves que ella no se creyó. Pensó desde el primer momento que la realidad era la relación sentimental que había comenzado con uno de sus superiores de 42 años.
La carta de despido no estaba bien argumentada
Como apunta el medio francés antes citado, la carta de despido carecía de argumentos sólidos para avalar la rescisión de contrato de la trabajadora. “Las razones eran falaces o se basaban en certificados complacientes”, señalaron los jueces.
Entre las consideraciones que no se han tenido en cuenta aparece el impago en salarios y cotizaciones, el retraso en la elaboración de informes cuando se los pedían e incluso, el haber empleado un tono cortante e inapropiado con el gerente de la tienda.
Pero no pudieron probar nada de esto en los tribunales, lo que le valió a la ex empleada el reconocimiento de despido improcedente. El tribunal de casación consideró que había una coincidencia en las fechas, entre el momento en que se supo del romance que mantenía la trabajadora y el de la notificación del despido.
“Un trabajador tiene derecho a que se respete su vida privada”
Fue la Justicia quien desmontó todo el argumentario de la empresa y anuló el despido. Como señalaron en la sentencia, “el despido debe fundarse en hechos concretos, objetivos y comprobables imputables al trabajador y será nulo cuando se base en consideraciones privadas”.
Como señala el expediente, en el que se adjuntaron WhatsApp entre estos dos amantes, la empleada fue despedida justo en el momento en que se conoció su relación. Y por eso, entre los demás miembros de la plantilla se desató un escándalo. La Corte Francesa lo ha dejado claro: “El trabajador tiene derecho incluso durante el horario laboral y en el lugar de trabajo, a que se respete su vida privada”.
Advierte a las empresas de que “el empresario no puede sin violar esta libertad fundamental, fundamentar el despido en un hecho relativo a la intimidad de la vida privada de un trabajador”. Ahora, tendrán que pagar 20.000 euros por el despido que es “nulo y sin valor”.
