
Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, ha querido dejar claro desde el escenario internacional de la Organización Internacional del Trabajo en Ginebra cuál es su titular frente a los discursos neoliberales sobre el empleo. “Subir el SMI no destruye empleo, lo impulsa”, afirma la ministra. Con estas palabras ha resumido lo que, a su juicio, ha sido una de las políticas más efectivas de su Ministerio desde que empezó a trabajar en el, en 2018.
Durante el segundo foro de la Coalición Mundial para la Justicia Social, Díaz ha reivindicado que el incremento del salario mínimo ha contribuido al crecimiento económico de España, elevando los sueldos más bajos y revirtiendo la precariedad sin frenar el empleo. “Nos dijeron que se destruiría empleo. Hoy tenemos la tasa de paro más baja en 17 años”, ha ensalzado.
Además, recuerda que el salario mínimo ha subido un 61 % desde 2018 sin que se hayan cumplido las predicciones negativas de quienes advertían de consecuencias económicas adversas. Para la ministra, este aumento es una “política redistributiva, feminista y de sentido común”.
Antes de su intervención, Díaz se ha reunido con el secretario de Trabajo de México, Marath Bolaños, para abordar la reducción de la jornada laboral, donde México busca rebajarla de 48 a 40 horas semanales, mientras que en España el Ministerio de Trabajo mantiene su compromiso de reducirla a 37,5 horas. También han destacado el apoyo conjunto de ambos países al nuevo convenio internacional para proteger los derechos laborales en plataformas digitales.
Díaz ha querido cerrar con una afirmación directa que resume su enfoque. “La justicia de género y la justicia social son inseparables. El SMI es una herramienta feminista”, ha asegurado. Su valoración final del resultado de estas políticas, en dos palabras. “Éxito rotundo”.