Las solicitudes de dependencia tardan casi el doble de lo que marca la ley en resolverse

El Ministerio de Derechos Sociales ha publicado por primera vez el Panel del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), revelando que la tramitación media de las solicitudes alcanza los 338 días, muy por encima de los 180 días establecidos por ley. El dato, actualizado a marzo de 2025, refleja un incremento de 10 días respecto al año anterior y pone de manifiesto uno de los mayores retos del sistema. A pesar de la mejora en la lista de espera, que ha bajado un 9,4%, el número total de solicitudes ha aumentado un 5,4%, alcanzando los 2,2 millones.

Una tramitación cada vez más lenta

El tiempo medio de resolución de expedientes ha seguido una tendencia ascendente. Actualmente, supera en 158 días el plazo legal estipulado en la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia (LAPAD). Esta demora ha sido señalada por la secretaria de Estado de Derechos Sociales, María Rosa Martínez Rodríguez, como una de las principales dificultades del sistema.

Te puede interesar

Un funcionario de la Seguridad Social explica qué hacer con la baja médica: “la empresa suspenderá la relación laboral y dejará de pagarte”

Además, durante el mes de marzo de este año, 2.592 personas fallecieron sin haber recibido la prestación, a pesar de tener reconocida una situación de dependencia o estar pendientes de valoración. Esta cifra supone una reducción del 18,10% respecto al año anterior, aunque sigue siendo una de las grandes preocupaciones del ministerio.

Evolución de la lista de espera y perfil del solicitante

A marzo de 2025, 182.532 personas se encontraban en lista de espera, es decir, ya habían superado los seis meses desde la solicitud sin recibir ninguna prestación. Esta cifra representa el 8,32% del total de solicitudes registradas. Desde 2020, la lista de espera ha disminuido un 41%, lo que ha sido posible, según el ministerio, gracias al Plan de Choque para la reducción de los tiempos de espera.

Actualmente, 1.553.173 personas están recibiendo algún tipo de prestación, lo que supone un incremento del 7,6% respecto al año pasado. El perfil más común del solicitante es el de una mujer mayor de 80 años, que representa el 62% del total.

Desigualdad territorial en el acceso al sistema

Los datos del SAAD reflejan importantes diferencias entre comunidades autónomas. Castilla y León destaca como la región con menor porcentaje de población potencialmente dependiente en lista de espera (0,01%), seguida de Ceuta (0,22%) y Cantabria (0,34%). En el otro extremo se encuentran Andalucía (8,83%), Cataluña (6,12%), Canarias (4,20%), Comunidad Valenciana (3,95%) y Madrid (3,38%).

Estas cifras se obtienen cruzando la población total con la base estatal de personas con discapacidad por edades, una metodología que el Gobierno pretende mantener con carácter trimestral para evaluar la evolución del sistema.

Reformas y desafíos de futuro

El ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha insistido en que el análisis continuo del SAAD es esencial para adaptar el sistema a los retos demográficos actuales. En febrero se presentó en el Congreso un anteproyecto de ley que pretende reformar la normativa de dependencia y discapacidad, con vistas a incorporar unas 400.000 nuevas solicitudes antes de 2030.

El nuevo modelo apuesta por una atención más personalizada y una mayor flexibilidad en los apoyos ofrecidos. Además, desde el ministerio se ha subrayado el aumento del 150% en la financiación del SAAD desde 2020, con la intención de reforzar el sistema tanto en términos económicos como en personal.

En cuanto a las personas cuidadoras no profesionales, el perfil más frecuente es el de una mujer de entre 50 y 65 años que cuida de sus padres, lo que ha llevado al ministerio a plantear políticas de cuidados con una clara perspectiva de género.