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Qué significa elegir quedarse en casa en vez de salir con amigos, según la psicología

Los psicólogos apuntan a que preferir quedarse en casa puede ser síntoma claro de estrés o de cansancio acumulado y explican por qué puede ser una actitud saludable.


Mujer en un sofá.
Qué significa elegir quedarse en casa en vez de salir con amigos, según la psicología |Envato
Berta F. Quintanilla
Fecha de actualización:

Preferir quedarse en casa y no salir con los amigos es saludablesegún la psicología. El plan de ‘sofá, manta y peli’ puede ser mejor que pasar la tarde en el cine, tomando algo o simplemente dando un paseo en compañía. Esto, que en muchos casos está considerado como negativo, es síntoma claro de bienestar emocional. 

Muchos expertos en psicología destacan que pasar tiempo a solas es beneficioso para aprender a conocerse uno mismo. Porque la calle, el trabajo o la vida en general está llena de “ruidos” que se mezclan con demasiada gente alrededor y un ritmo frenético. Por eso, cuando llaman para salir, y se responde que no apetece, lo común es que los amigos piensen que algo va mal. 

Nada más lejos de la realidad. Hay personas que son introvertidas, para las que su lugar ideal está en la soledad. “Recargan energías cuando están sólos y se ponen nerviosos con las interacciones sociales”, resaltan los expertos en la materia citados por ‘Los Andes’.

Pensar, tomar decisiones importantes o replantearse la vida

Un hombre mira en un balcón. | Envato

Querer estar en casa el mayor tiempo posible es también un síntoma claro de la necesidad de pensar, de conocerse un poco más y de comenzar una búsqueda interior. Ese silencio en soledad es imprescindible para tomar decisiones importantes que tienen que ver con la propia vida, como cambiar de trabajo, de casa o de pareja. 

Aunque como señalan los psicólogos, no siempre tiene que haber un motivo detrás y no querer salir de la casa puede deberse al cansancio acumulado, al estrés o formar parte de un momento de la vida en el que no se necesita mucho movimiento o actividad. 

¿Y si hay un problema?

Cuando la persona se muestra reacia a salir con los amigos en más de una ocasión, puede ser que detrás haya un problema emocional más importante. Puede ser una manera de huir de momentos complicados. 

Ansiedad, falta de objetivos que llevan a una dejadez motivacional e incluso estar siempre triste, son síntomas claros de que quien dice no querer salir “porque no apetece” esconde algo más.

Los síntomas más claros de que hay un problema son el silencio y la distancia. Esto es, que cuando uno de los amigos se ‘descuelga’ del círculo es porque está pidiendo ayuda. “Podría deberse a una depresión enmascarada”.

Aunque esto no tiene por qué ser siempre así. Otro de los puntos que podría influir es que no existe la conexión que había antes con los amigos. Desaparece la sintonía y cambian los vínculos. “Las prioridades cambian con el tiempo, una persona que siempre se ha sentido unida a un grupo puede cambiar sus vínculos y alejarse del grupo que gira en torno a una actividad, sin que sea necesario un conflicto”.

Esto se conoce como ‘selección afectiva’, es decir, que la persona es libre de irse con quien quiera, normalmente con quien comparte necesidades.

Las redes sociales como falsa realidad

Una mujer tumbada en el sofá de su casa haciéndose una fotografía. | Envato

Con las nuevas tecnologías, las redes sociales y más recientemente la llegada de la Inteligencia Artificial (IA) las relaciones interpersonales están cambiando. Muchas veces dan una sensación de estar con mucha gente “cuando en realidad estamos solos”, destacan los psicólogos en el medio digital antes citado.

Esto es así porque “se reduce la calidad de los vínculos” aunque en el teléfono móvil parezca que se está al lado del otro.

Al final, el tiempo pasado en redes sociales se traduce en menos horas con los amigos reales, y como ha quedado demostrado en varias ocasiones, cuanto más tiempo se pasa en redes sociales, menos necesidad hay de contacto.

“Si te sientes aliviado al cancelar una cita, es que no estás cómodo”

Cuando una persona siente la necesidad de quedarse en casa, descansando, y esta es mayor que salir con los amigos, hay que sentarse a escuchar. “No está mal cancelar una cena, por ejemplo, si eso te hace sentir mejor. Puede ser una señal de que no se está cómodo en esa relación”.

Si la soledad es tristeza, lo mejor es acudir a un especialista o hablarlo con alguien de confianza. Los verdaderos amigos se convierten en los pilares fundamentales de cualquier persona que esté pasando por un problema.

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