
Si desde hace semanas, por no decir años, son los habitantes de las islas los que se quejan del turismo masificado en Baleares y, sobre todo, en Canarias. Ahora son los propios turistas los que vienen a abrir aún más el debate sobre la forma de hacer turismo en España, después de que se abra la veda con una posible tasa turística que tendrían que pagar los que visiten España.
La medida que está sobre la mesa, aunque no implementada aún, es la de crear un impuesto insular sobre las pernoctaciones turísticas. Esta propuesta ha sido idea del presidente canario, Fernando Clavijo (Coalición Canaria), quien no dudó en señalar que “o se suben los salarios vinculados a la productividad, o se suben los impuestos”. Y es que Canarias, según el INE, recibe 20 de cada 100 turistas de los que visitan nuestro país. Una situación límite que ya ha provocado manifestaciones en las islas bajo el lema “Canarias tiene un límite”.
Reino Unido se queja de sus vacaciones en Canarias
Si desde las islas se posicionan en contra del turismo masivo, no paran de manifestarse e incluso ya proponen medidas como la tasa turística, por su parte, desde Reino Unido también toman posición para protestar por el aumento de los costes de sus visitas. “Antes me encantaba España, pero no he vuelto desde que pusieron el impuesto turístico”, afirmaba un ciudadano británico. Otros se quejan de que las vacaciones en Canarias han pasado a costar “hasta 2.000 libras por semana”, dejando claro que el turismo de bajo coste es el principal perjudicado. Estas son algunas de las impresiones recogidas en medios británicos como The Mirror o The Sun, en los cuales destacan la desproporcionalidad de la nueva tasa al turismo. Aunque aún no esté en vigor, desde estas fuentes aseguran que son muchos los turistas que ya han cancelado sus reservas.
Algunos interpretan la situación como un gesto hostil, impulsado por mensajes radicales difundidos en redes sociales, como el cartel en Tenerife con la frase “Matar a un turista” o los ataques a coches de alquiler. Aunque estos incidentes han sido aislados, la prensa británica les ha dado gran visibilidad.
Los ingleses no comprenden la verdadera situación que vive Canarias con el turismo
Sin embargo, el panorama es más complejo. En enero de 2025, Canarias recibió más de 775.000 turistas internacionales, un 3 % más que el año anterior. A pesar de ello, los operadores turísticos ya perciben una desaceleración en las reservas de verano, posiblemente por la tensión social y la incertidumbre legal. Ejemplo de esto es el intento del municipio de Mogán (Gran Canaria) de aplicar una tasa turística de 0,15 euros diarios por persona, suspendida en su momento pero ahora vigente tras un fallo judicial favorable.
Todo este malestar refleja una paradoja crónica del archipiélago: su fuerte dependencia del turismo en un entorno limitado y frágil. Como expresó Francisco Linares en el VI Congreso de Coalición Canaria: “No estamos en contra del turismo, solo queremos reflexionar con qué modelo turístico queremos seguir avanzando por el bienestar de nuestra gente”. Una reflexión que, por la magnitud de la respuesta social e internacional, ya no puede postergarse.