El contrasentido de las becas en España: llegan más a quienes menos las necesitan

Un estudio elaborado por el del Centro de Políticas Económicas de Esade, concluye que el 60% de familias pobres no recibe ayuda y un 13% de las ricas, sí.

El 60% de las familias pobres no recibe becas escolares EFE
Javier Martín

Las becas en España, un instrumento ideado para equilibrar la desigualdad de recursos económicos, no las están recibiendo los más necesitados. Un reciente estudio del Centro de Políticas Económicas de Esade, titulado ‘Radiografía del gasto de las familias en material escolar y las becas que ayudan a compensarlo’, ha puesto de manifiesto la grave situación de las ayudas educativas en España, que no llegan a la mayoría de las familias que las necesitan y que presentan una gran disparidad entre comunidades autónomas. 

El estudio, realizado por los investigadores Ángel Martínez y Lucía Corberos, se basa en una encuesta a más de 2.000 hogares con hijos en edad escolar y en datos oficiales sobre el gasto público en becas. Según desarrolla, solo el 40% de las familias más pobres recibe alguna ayuda para libros de texto, material, comedor o escolarización, aunque, en teoría, el 100% de ellas tendría derecho. Esto significa que hay más de un millón de familias en situación de pobreza que no reciben ningún tipo de apoyo económico para la educación de sus hijos.

El estudio identifica varias causas que explican este bajo nivel de cobertura: la escasez de recursos (poco dinero) destinados a las becas, la complejidad y falta de transparencia de los requisitos y procedimientos para solicitarlas, y la desinformación y desconfianza de las familias sobre sus posibilidades de acceder a ellas. Las becas se antojan como un instrumento clave para garantizar el derecho a la educación y reducir las desigualdades sociales.

Desinformación y un sistema poco equitativo, las claves

"Tenemos un porcentaje relevante de familias que no la solicitan o bien porque no creen que cumplan todos los requisitos o porque no creen que van a poder demostrar que los cumplen que es en muchos casos, el gran drama", afirma Ángel Martínez. "Tenemos también a algunos que incluso solicitándolas les es rechazada la solicitud no por renta, patrimonio… cualquier requisito de esas características, sino por temas de incapacidad de rellenar la solicitud de forma adecuada". Es decir, hay familias vulnerables incapaces de lidiar con la burocracia que supone pedir algunas becas.

Otro aspecto preocupante que se señala es que el sistema de becas no es equitativo, ya que hay familias con rentas altas que también reciben ayudas, mientras que otras con rentas bajas se quedan sin ellas. "En el top de renta, entre el 20% de hogares más acomodados más pudientes, el porcentaje de quienes reciben ayudas baja, es de un 13%, pero sigue siendo significativo", destaca Martínez.

 "Hay hogares que tienen renta bastante considerable que están recibiendo beca y sin embargo no todos los hogares vulnerables la están recibiendo. Idealmente a lo que deberíamos avanzar es a maximizar esta tasa de cobertura de los hogares más pobres estableciendo sistemas más eficaces, mayor comunicación entre administraciones públicas y, sobre todo, más ayudas para las familias pobres para que puedan presentar esta documentación”, continúa sugiriendo el estudio.

Diferencia entre comunidades autónomas

Además, el estudio muestra que hay una gran heterogeneidad entre comunidades autónomas en cuanto al nivel y tipo de ayudas que ofrecen a las familias. Así, hay regiones como Cataluña o Baleares donde menos del 10% de los hogares recibe algún tipo de ayuda para material escolar o comedor, mientras que en otras como Extremadura o Castilla-La Mancha superan el 30%. 

Estas diferencias se deben tanto al nivel socioeconómico de las familias como a las políticas educativas y sociales de cada comunidad. El informe recomienda armonizar los criterios y requisitos para acceder a las becas y aumentar la transparencia y rendición de cuentas sobre el uso y destino de los fondos públicos destinados a este fin, además de plantear la necesidad de aumentar el presupuesto destinado a las becas, simplificar y unificar los criterios y procedimientos para solicitarlas, informar mejor a las familias sobre sus opciones y derechos, facilitarles el acceso a la documentación necesaria, evaluar periódicamente los resultados y efectos de las becas e implicar a todos los agentes educativos en su mejora continua.

Archivado en:

Otras noticias interesantes

Lo más leído