Un inquilino okupa la vivienda de su compañero de trabajo y lo amenaza delante de las cámaras de televisión: “lo vas a pagar”

Una de las mayores preocupaciones de los caseros es que el inquilino deje de pagarle el alquiler y no se vaya de la vivienda, pasando a ser okupas en la misma. Este término ya se conoce como ‘inquiokupación’ y es justo lo que le ha pasado al propietario de una vivienda en Girona, que alquiló su casa a un amigo, y tras más de un año sin poder cobrar el alquiler solo recibe amenazas e insultos. 

La pesadilla por la que está pasando este vecino de Ribes de Freser, en Girona, ha sido emitida en el programa ‘Espejo Público’ de ‘Antena 3’. En él Albert explica cómo ha llegado a la situación en la que se encuentra. 

Te puede interesar

El camino de esta conocida cadena de hamburguesas para 'hacerse un McDonald's' y conquistar España

Según explica, el inquiokupa era un compañero de trabajo y amigo al que ofreció su vivienda en alquiler porque él tenía que realizar reformas en la suya. Albert se instaló durante ese tiempo en un local de sus padres, pero a los dos meses dejó de recibir el pago de la renta. 

Tras más de un año sin pagar, el okupa lo amenaza 

Un año y dos meses más tarde de que la relación entre ambos comenzara, Albert se muestra desesperado en el medio, la situación es insostenible, ya que, explica, cobra una pensión de 600 euros, y solo la factura de luz que generan los okupas de su casa son 300 euros mensuales. 

En el inmueble viven su antiguo amigo y su familia, que se ha mostrado violento ante la visita del casero junto a las cámaras del medio cuando han tratado de conocer su versión de los hechos. 

El okupa asegura que ha pagado más de un año de alquiler, y que Albert, su casero, se ha encargado de cortarles la luz y el gas, algo por lo que su bebé de 15 meses ha sufrido una enfermedad pulmonar. Explica además que el casero tiene más de una vivienda. 

La situación entre arrendador y okupa es tensa, llegando incluso este a amenazar en directo al casero “el día de mañana acuérdate de mí porque todo lo que hayas hecho pasar a mi familia lo vas a pagar", sentencia el inquiokupa. 

Por su parte, Albert asegura que el corte del gas en la vivienda no tiene nada que ver con él, sino que se ha producido porque los okupas no dejaron a la compañía entrar a la vivienda a hacer la revisión y ellos mismos fueron los que cortaron el suministro. 

El casero se lamenta porque el okupa tiene las de ganar

Albert se muestra resignado por la situación que está viviendo, y ha decidido acampar ante el Ayuntamiento de Ribes de Freser para denunciar su situación. Desde la administración le han ofrecido una vivienda para que pueda pasar un mes mientras se soluciona la situación, algo que el casero ha rechazado. "Yo tengo mi casa, que le ofrezcan esa casa u otra ellos", explica.