Un hombre compra dos boletos de lotería premiados, pierde uno y pone una demanda porque no quieren pagárselo

Un jugador recurrente de la lotería americana Mega Millions asegura que es el legítimo propietario de dos boletos ganadores del premio mayor vendidos en una gasolinera de California, pero dice que perdió uno de ellos. Aun así, insiste en reclamar la totalidad del premio.

Tal y como ha informado el New York Post, Faramarz Lahijani reclamó la mitad del premio de 394 millones de dólares del sorteo realizado el 8 de diciembre de 2023, y que había sido vendido en una gasolinera Chevron en Encino, California. Como no pudo presentar el segundo boleto, se dio un año completo desde la celebración del sorteo para reclamar los otros 197,5 millones de dólares del premio.

Fue hace apenas unos días cuando lahjiani presentó una demanda contra la Lotería de California, alegando que él era el comprador del segundo boleto premiado, pero que no podía presentarlo porque lo había perdido.

Las claves de la demanda

La demanda por incumplimiento de contrato fue presentada en el Tribunal Superior de Los Ángeles el pasado 6 de diciembre, a tan solo unas pocas horas de la fecha del vencimiento. Según el medio ‘Patch’, el texto de la demanda expone que “en virtud de haber presentado oportunamente el primer boleto coincidente, el demandante tiene derecho a la totalidad del premio mayor”.

Lahijani asegura que lleva usando esos mismos números durante décadas, ya que en su día fueron escogidos por sus hijos. Además, se ampara en las probabilidades tan bajas de que un mismo establecimiento haya vendido el mismo día dos boletos ganadores con los mismos números. O es una increíble casualidad, o efectivamente fueron compradas por la misma persona.

El New York Post se puso en contacto con el portavoz de Lotería de California, que asegura que “existen varias explicaciones; tal vez una persona quiso probar suerte en dos filas diferentes por alguna razón, o tal vez un par de amigos quisieron probar suerte con los mismos números exactos. No sabremos exactamente cómo sucedió esto hasta que se reclame el premio”.

Aunque aún no se conoce el resultado de la demanda, los miembros de la comunidad de Encino en California ya lo consideran uno de los acontecimientos más curiosos de su historia.