
Los vehículos con motor de combustión de gasolina o diésel no se podrán vender a partir de 2035. Así se ha acordado en el Pleno del Parlamento Europeo tras validar el acuerdo alcanzado con el Consejo Europeo, que determinará que los coches y los vehículos comerciales ligeros de nueva matriculación, incluidos furgonetas, sean de cero emisiones de CO2 ese mismo año.
La votación de los eurodiputados, sin embargo, ha acabado con un resultado muy ajustado, contando con 340 votos a favor, 279 en contra y 21 abstenciones, pero que ha acabado con un resultado en línea con la mayor ambición climática de la Unión Europea en los últimos años, el de adentrarse en el camino hacia las cero emisiones de CO2 y que es el tronco del programa ‘Objetivo 55’.
El paso a ello no será directo, si no progresivo, con un objetivo intermedio para 2030. Por ese entonces, el Consejo Europeo vigilará el compromiso adquirido con los estados miembro de reducir el 55% de las emisiones en turismos y un 50% en furgonetas. La próxima etapa, antes de ser publicado de forma oficial en el Diario Oficial de la Unión Europea (UE), será la de la aprobación del texto también por el Consejo Europeo.
🚗 El Parlamento confirma los nuevos objetivos de reducción de emisiones de CO2 para los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos, una de las medidas del paquete «Objetivo 55».
— Parlamento Europeo en España (@Europarl_ES) February 14, 2023
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La hoja de ruta hacia las cero emisiones
La primera fecha marcada en rojo por la Comisión Europea, una vez la norma se encuentre en vigor, será el año 2025, cuando se comenzará a aplicar una metodología para evaluar y comunicar datos sobre las emisiones de CO2 que han emitido los coches y furgonetas vendidos en el mercado europeo durante todo su ciclo vital. No se descarta, asimismo, que esto incluya proposiciones legislativas.
Un año más tarde, con los datos en la mano, se comprobará la diferencia entre los valores tope de emisión y las cifras reales de consumo de combustible y energía. Así, se comunicará a los fabricantes de vehículos del sistema configurado para ajustar las emisiones de CO2. Además, también se plantearán medidas de seguimiento adecuadas y se publicarán de forma bianual un documento para examinar el progreso hacia la movilidad por carretera con cero emisiones.
Como también han informado, habrá letra pequeña en forma de exenciones para dos colectivos: los fabricantes responsables de pequeños volúmenes de producción en un año natural (de 1.000 a 10.000 automóviles nuevos o de 1.000 a 22.000 furgonetas nuevas), hasta 2025, y los que matriculen menos de 1.000 vehículos nuevos anuales, que no entrarán dentro de la normativa.
Sin bonificaciones para los vehículos cero y bajas emisiones
La medida supondrá la supresión a partir de 2030 de los incentivos para los fabricantes de vehículos de cero y bajas emisiones (ZLEV), que recompensa a los que vendan más, con un 25% en los vehículos, y con un 17% en el caso de las furgonetas.
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