Las multas de Tráfico más comunes este verano: hasta 500 euros

La Guardia Civil de Tráfico está muy pendiente en los meses de verano de los miles de desplazamientos por las carreteras españolas. La Benemérita es responsable de que se cumplan todas las normas al volante, que marca la Dirección General de Tráfico (DGT), y en el periodo estival, las multas se multiplican pudiendo pagar sanciones de hasta 500 euros. La cuantía dependerá de la gravedad de la infracción: conducir a más velocidad de lo marcado o usar el móvil al volante pueden suponer hasta la pérdida del carné.

Aunque las multas más frecuentes suelen ser por exceso de velocidad (a pesar de los radares de la DGT) y distracciones al volante, hay otras situaciones que generan dudas al conductor. Una de ellas, la de si se puede conducir con chanclas o si está permitido llevar algún objeto en la luna trasera del coche. En algunos casos, sancionar o no estas conductas dependerá del criterio del agente, al no aparecer reguladas pero suponer un peligro para el infractor y los demás usuarios.

Algunas de las multas que pone la Guardia Civil pueden suponer un desembolso importante de más de 500 euros e incluso podrían llevar a la prohibición de conducir. Pero, ¿cuáles son las multas más comunes durante el verano? 

Tráfico sanciona con pérdida de puntos y multas estas infracciones

Para empezar, hay que saber que quienes ponen las multas en carretera son los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, en el caso de que se detecte que se imcumple alguna normativa de la DGT (Dirección General de Tráfico). 

Exceso de velocidad 

Pisar el acelerador más de la cuenta, y no hacer caso de las señales que limitan la velocidad en carretera es el principal motivo de sanción este verano. Son miles las multas que se acumulan ya por sobrepasar, por ejemplo, los 120 kilómetros / hora en autovía (salvo en los casos en que está permitido como los adelantamientos).

Dejar de lado la señalización supone un importante riesgo tanto para el conductor del vehículo como para los demás usuarios, y aumenta la posibilidad de accidentes mortales. Los radares de la DGT, ubicados en puntos estratégicos, pueden ‘pillar’ rápidamente al infractor. 

Lanzar colillas por la ventana

Los fumadores deben estar en alerta mientras conducen y no lanzar jamás colillas de cigarro por la ventanilla. Al riesgo de incendio provocado por el calor, se suma que esta práctica es poco (o nada) sostenible y que está duramente castigada por la Guardia Civil. Los infractores tendrán que pagar 200 euros de multa y perderán 2 puntos del carné. Fumar mientras se conduce está considerado peligroso porque para sostener el cigarro o el váper hay que soltar el volante. Pero no está prohibido. 

Coger el teléfono móvil mientras se conduce

A pesar de que casi todos los coches hoy día vienen equipados con sistema de Bluetooth, son muchos conductores los que siguen atendiendo el teléfono móvil al volante. Responder un WhastApp o consultar las redes sociales supone perder de vista la carretera.

Y sólo dejando de mirar un segundo, ya es peligroso. Pero no es sólo esto, sino que usar de manera inadecuada la navegación electrónica en los dispositivos puede venir de la mano de una sanción. 

Comer, beber, o realizar cualquier actividad que implique dejar de estar atento a la carretera, está sujeta a la consideración de la Guardia Civil, y serán los agentes quienes determinen la cuantía o si es sancionable.

Colocar mal el equipaje: una de las multas más caras

Cuando se sale de viaje hay que llevar el maletero lleno con la ropa, o los enseres necesarios. En cualquier caso, todo debe estar perfectamente colocado para que no moleste ni al conductor ni a los pasajeros. Si la carga no está bien repartida, la sanción puede llegar a los 500 euros. 

Los papeles y la documentación, siempre a mano

Los agentes de la Guardia Civil comprueban casi al instante si el vehículo tiene la ITV (Inspección Técnica de Vehículos) superada. Pero también si el coche lleva el seguro en regla y el conductor tiene todos sus papeles en fecha. Esto incluye que el carné de conducir no esté caducado. 

Además como consejo, conviene revisar el estado de las luces, los neumáticos o las pastillas de freno. Ya que además de una sanción si presentan algún defecto, podrían ocasionar accidentes.