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Este es el pescado más venenoso del mundo: Sanidad todavía no lo ha retirado y está en todos los supermercados

Un pescado que consumimos casi todas las semanas en nuestras casas puede estar contaminado por productos químicos con los que está en contacto.


Varios pescados y mariscos en una pescadería
Varios pescados y mariscos en una pescadería |Envato
Antonio Montoya
Fecha de actualización:

Uno de los pescados más consumidos entre los españoles y que además solemos comerlo crudo es también uno de los más venenosos del mundo. No es otro que el salmón, un pescado que suele criarse y producirse en piscifactorías. En estos lugares, los peces son “cultivados” y alimentados con productos como harina de pescado y una serie de aditivos químicos procesados que los exponen a una contaminación química que puede traducirse en problemas de salud para aquellos que los consumen.

El salmón pasa por diferentes procesos en su cultivo y es en algunas fases, sobre todo las que se centran en su engorde y crecimiento principal hasta convertirse en peces adultos, cuando se exponen a algunas sustancias químicas debido al procesado de algunos alimentos y a los procedimientos de limpieza de las piscinas. Por su parte, Sanidad todavía no ha retirado ningún producto de salmón en España, sin informar tampoco de ningún caso grave de intoxicación alimentaria provocada por el salmón. 

Cómo se cultiva el salmón y en qué fase se puede contaminar

A pesar de que el cultivo de salmón en piscifactorías es un proceso controlado y que busca la sostenibilidad, a veces puede estar expuesto a sustancias poco recomendables para el posterior consumo humano. La crianza del salmón para consumo tiene varias etapas que buscan garantizar el crecimiento saludable de los peces hasta su comercialización. Las fases principales de su cultivo son:

  1. Reproducción y cría de alevines. En esta fase se eligen los salmones reproductores para la fertilización de los huevos. Los huevos fecundados se incuban en condiciones controladas de temperatura y oxígeno hasta que eclosionan.Las crías de salmón se mantienen en tanques de agua dulce con alimentación especializada hasta alcanzar unos gramos de peso.
  2. Fase de agua dulce o pre-engorde. Los alevines crecen en tanques o estanques de agua dulce con condiciones óptimas de temperatura y oxígeno. Se les suministra una dieta rica en proteínas para favorecer su desarrollo. Es en esta fase en la que los salmones reciben más alimentos procesados que incluyen grasas nocivas y componentes tóxicos que pueden contaminarlos y llegar hasta el consumidor final.
  3. Fase de agua salada o engorde. Esta etapa viene precedida de un proceso de "smoltificación", una adaptación fisiológica para vivir en agua salada. Los juveniles se trasladan a jaulas flotantes en el mar o grandes estanques de agua salada. Se les alimenta con pellets ricos en nutrientes, algunos de ellos elaborados con productos químicos, y se monitorean parámetros como temperatura, oxígeno y calidad del agua. El salmón crece en estas condiciones entre 12 y 24 meses hasta alcanzar un peso comercial (4-6 kg).
  4. Cosecha y procesamiento. Una vez alcanzado el peso deseado, los salmones son extraídos y sacrificados de manera rápida para minimizar el estrés. Se procesan en plantas especializadas donde se filetean, refrigeran o congelan según el mercado de destino.

Es sobre todo en la segunda y en la tercera fase, de pre-engorde y engorde respectivamente, cuando estos peces reciben más cantidad de nutrientes que contienen toxinas y componentes contaminantes o químicos. Esta es la razón por la que el salmón tiene decenas de parásitos. Además, los encargados de su cuidado utilizan a menudo pesticidas y antibióticos para prevenir enfermedades, lo que provoca que muchas de esas sustancias acaben en la superficie de los pescados y. posteriormente, en los organismos de los consumidores.

Por otra parte, los trabajadores de las piscifactorías utilizan monos y equipos de protección especial, con el fin de mantener la limpieza en las piscinas, lo que provoca el aumento del contacto de los peces con sustancias tóxicas, en concreto las que se utilizan para higienizar las piscinas de cultivo.

Por qué es mejor comer salmón salvaje

Es importante distinguir entre el salmón criado en piscifactorías y el que se encuentra en estado salvaje. Mientras que el salmón salvaje se alimenta de manera natural y presenta un perfil nutricional más equilibrado, el de cultivo suele contener mayores niveles de grasas poco saludables y residuos de contaminantes.

En términos de valor nutricional, el salmón que habitualmente se consume en los hogares aporta alrededor de 212 calorías por cada 100 gramos, mientras que el salvaje tiene un menor contenido calórico, con aproximadamente 115 calorías por la misma cantidad.

A pesar de estas diferencias, muchas personas continúan consumiendo salmón debido a su alto contenido en ácidos grasos Omega 3, conocidos por sus beneficios para la salud. No obstante, algunos expertos aconsejan optar por otras fuentes ricas en Omega 3, como las sardinas, que pueden ofrecer una alternativa más saludable.

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