Cómo aprender inglés rápido después de los 45 años

Aprender inglés rápido puede ser un objetivo difícil de alcanzar, más después de los 45 años, en donde la falta del tiempo y el hábito de estudio juegan en contra a la hora ponerse a estudiar un idioma. Cubrir este requisito es fundamental en muchas ofertas de trabajo, por lo que dominar dos o más lenguas puede marcar la diferencia.

Buscar y encontrar una fórmula de estudio eficiente y exitosa, no significa que el conocimiento del inglés llegará de forma ‘mágica’ y sin esfuerzo. La clave, según los expertos de Adecco, es estudiar, practicar y recordar y eso lleva tiempo, aunque existen maneras más rápidas que otras para aprender un idioma.

Qué consejos son útiles para aprender inglés rápido

Las personas que están interesadas en aprender un idioma, como el inglés, y ya tienen más de 45 años, buscan una solución rápida que no les demande mucho tiempo, principalmente porque no lo tienen.

Al buscar en internet, se encontrarán cientos de consejos y opciones de pago o gratuitas para estudiar inglés. Sin embargo, desde Adecco, simplifican esta elección basándose en los consejos que pueden ser más útiles para la persona.

Para empezar, comprender cómo funciona el cerebro a la hora de aprender una lengua, puede ayudar a que estudiar otro idioma sea más fácil. La ciencia ha investigado sobre la capacidad de los seres humanos para los lenguajes y ha concluido que es una de las características que los diferencia de otros animales. Y que no funciona de igual manera en bebés que en adultos.

Formas rápidas de aprender inglés

Los expertos sostienen que existen dos vías para aprender un idioma. La tradicional, que consiste en sentarse y ponerse a estudiar un curso, con libros y ordenador y la que se da de forma inconsciente. Esta última es aquella que se da a través de la escucha del inglés, aunque no se esté prestando atención o se esté tomando nota.

Este tipo de aprendizaje surge sin darse cuenta, cuando se tiene el sonido de fondo, y el cerebro comienza a absorber palabras, acentos, gramática, etc. sin proponérselo y aunque no entienda lo que se dice. Por lo tanto, escuchar mucho un idioma no solo sirve para familiarizarse con el mismo, sino también para aprenderlo de forma inconsciente.

Otra forma de acelerar el proceso de aprendizaje es buscar las similitudes entre la lengua materna y el nuevo idioma, en cuanto a sonidos que puedan sonar más o menos igual. En Adecco dan el siguiente ejemplo: “si estás tratando de escribir la palabra «fantasma» y no está seguro si la h viene antes o después de la g, intente decirlo en voz alta. Prueba con “hgost”, el sonido “HG” parece imposible de pronunciar, ¿no es así? Pero el sonido «GH» en «fantasma» es posible”.

Asociar palabras suele ser otra técnica muy recomendada. Se trata de conectar términos, sonidos, movimientos o imágenes. Por ejemplo: cuando escucha ‘pío pío’ inmediatamente piensa en un pájaro, son conexiones mentales que se realizan de forma automática sin necesidad de pensarlas. Se puede hacer a través de un juego, en el caso de aprender un idioma, lo que lo hará más divertido.

Otro consejo efectivo para aprender inglés de forma rápida y sencilla es escuchar música en ese idioma, eso permite familiarizarse con nuevas palabras, mejorar la pronunciación y recordar de una forma más fácil. 

Aprender inglés uno mismo

Las personas mayores de 45 años que buscan aprender un idioma por lo general no tienen mucho tiempo e intentar participar en cursos con un horario fijo se torna un problema. Por eso, optan por el aprendizaje autodidacta, es decir, que se organizan sus propias clases con la ayuda de tutoriales, vídeos y audios. De la seriedad con la que se tome esta tarea, dependerá el éxito del estudiante.

Hay algunas pautas que deben tenerse en claro a la hora de comenzar con este sistema, como por ejemplo, establecer un hábito de estudio. Aprender todos los días, separando un tiempo fijo y manteniendo la disciplina y seguimiento es fundamental. También, es importante motivarse, tener en claro primero el objetivo por el que se quiere aprender inglés y no olvidarlo. 

Fijar los objetivos que se quieren alcanzar, como conversar con alguien nativo 15 minutos al día, traducir un texto por semana, etc. y darles seguimiento para observar su cumplimiento. Hay que ser muy metódico para lograr avances. Las herramientas audiovisuales como podcast o vídeos de YouTube de cursos gratuitos, pueden ser muy útiles para aprender de una forma más amena.