Esto es lo que se queda Hacienda de los regalos que los bancos hacen por domiciliar la nómina

Es habitual ver que los bancos regalan dinero para captar nuevos clientes, o iPhones si se cumplen ciertas condiciones. Estas estrategias de las entidades bancarias no salen gratis a los usuarios, en la mayoría hay que cumplir ciertos requisitos como domiciliar la nómina, pero eso no es todo y es que estos regalos no quedan fuera de la vista de Hacienda, y hay que tributar por ellos. 

Ya se sabe que la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) vigila las operaciones bancarias que realizan los usuarios para evitar el fraude fiscal, para, en caso de irregularidades, multar a los infractores.

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En el caso de recibir dinero por parte el banco también habrá que pagar impuestos, al igual que si se recibe un obsequio que no sea dinero en efectivo, como un televisor, un viaje o cualquier otro. Pero, ¿cuánto se paga por cada uno de ellos? 

Cómo tributan los regalos de los bancos 

Hay que tener en cuenta que los regalos de los bancos, además de tener una letra pequeña, como puede ser tener permanencia en la entidad o cumplir con ciertos requisitos para poder conseguirlos, no están exentos a ojos de la administración tributaria.

En este sentido, los regalos no son gratis y habrá que pagar impuestos por ellos, que varían en función de tipo de regalo que se reciba, según explican los expertos de HelpMyCash. 

En el caso de los regalos de dinero, como por ejemplo por domiciliar la nómina, esto se considera un rendimiento de capital mobiliario y por ello hay que pagar por ellos en el IRPF. Lo habitual, según explican los expertos, es que sea el banco el que en el momento de entregar el regalo, descuente la retención fiscal y haga el pago a Hacienda. Aunque esto no siempre es así, en ocasiones el banco se hace cargo de los mismos, por lo que conviene comprobar quién lo hará antes de aceptar el regalo. 

La cantidad a pagar suele tener una cantidad fija que dependerá el importe recibido, que actualmente está fijado en:

• Un 19% para importes interiores a 6.000 euros.
• Un 21% para importes de entre 6.000 y 50.000 euros.

Por ejemplo, si la promoción bancaria supone recibir un regalo de 300 euros, un 19% correspondería al impuesto, por lo que lo más común será ver en la cuenta un ingreso de 300 euros y un posterior cargo por 57 euros. 

Los regalos en especie como smartphones o televisores tampoco se libran de tener que pagar sus correspondientes impuestos a Hacienda. En este caso se considera retribución en especie, según aclara el Banco de España, y la entidad bancaria, deberá informar en un certificado de retenciones de cuál es el valor del regalo y cuál el importe de la retención. 

En estos casos, la práctica habitual es que una vez que el banco haga entrega del regalo, realice un cargo en la cuenta del cliente por el importe que corresponda a los impuestos. 

Qué pasa si en la cuenta hay más de un titular

Es bastante usual que las cuentas bancarias tengan más de un titular, en esta situación serán ambos los que tendrán que tributar por el regalo recibido por el banco, cada uno de ellos en proporción al porcentaje de titularidad que le corresponda.