Las hamburguesas de McDonald's ya no cuestan un euro por este motivo que afecta a tu bolsillo

Con más de 600 locales repartidos por toda España y más de 41.000 por todo el mundo, McDonald’s ha decidido aumentar el coste de su hamburguesa estándar por primera vez en más de una década. Esto, con motivo de la paulatina inflación, que está asustando tanto a los hogares como a todas las organizaciones multinacionales.  

Hablamos de la que es su hamburguesa más icónica, la característica cheeseburger, que es también sello y emblema de la cadena de comida rápida desde que comenzara a operar, allá por el año 1940 en California.  

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Una cheeseburger que es considerada como uno de los productos favoritos de sus fieles consumidores, de lo que ahora ha dejado de costar el precio simbólico de 1 euro. Y no solo en España, sino también en otras partes del mundo, sobre todo en Estados Unidos y resto de Europa. Además, por su parte, la cadena también ha informado del incremento de los postres y artículos concretos como las bolas de queso y alitas de pollo, entre otros. 

McDonald’s pasa a cobrar ahora 1,45 euros por su clásica Cheeseburger 

Si nos remitimos a la pregunta de ¿Cuántas hamburguesas se consumen en España?, según el Observatorio DBK la respuesta sobrepasa los 550 millones de unidades. Estas cifras confirman una media de unas 11 hamburguesas por habitante al año.  

Por otro lado, está la inflación, que también tiene sus efectos en este sector. En estos últimos años hemos visto una subida de precios generalizada. Según datos de food retail, los precios en restauración aumentaron un 4,1 % en diciembre de 2024 en comparación con el mismo mes de 2023. Por esto, son cadenas como la de McDonald’s las que han tenido que cambiar sus precios. 

Así, y con razón de la presente inflación, ello pasa factura a estas hamburguesas y ha hecho que el precio que se tenga que pagar por esta hamburguesa sea ahora de 1,45 euros, bastante menos que otras, pero por encima de lo que costaba en su momento.  

Los consumidores consideran que la comida rápida se ha convertido en un lujo 

Para el caso de otros establecimientos como Burger King, su principal competencia, la más barata tiene un coste de 1,99 euros, por lo que estos precios han afectado sensiblemente. Como tal, esta subida de precios es debido al incremento de los costes operativos, como los de la carne y el pan.  

De todos modos, este incremento de la inflación no solo ha afectado a las hamburguesas de 1 euro, sino también a otros clásicos de las cadenas de ambos restaurantes, que han visto cómo han tenido que cambiar los precios de insignias como la Big Mac o la Whopper. 

Esta subida de precios ya se ha notado en la demanda, especialmente en países como Estados Unidos. Allí, incluso, y a partir de la última encuesta de LendingTree, el 78% de los consumidores considera que el 'fast food' se ha vuelto un "lujo", donde son muchos los que sostienen que los restaurantes de comida rápida son ya demasiado para los gastos que tienen que asumir en su día a día.