España es el país que peor rentabiliza su fuerza laboral, según indican los datos de la Oficina Europea de Estadísticas, Eurostat. Estos apuntan que a los 3,02 millones de parados registrados a nivel nacional hay que sumarles otras 985.000 personas que no trabajan, pero no se cuentan como tal, más 1,1 millones de infraempleados, obligados a trabajar a tiempo parcial por no encontrar un puesto a tiempo completo.
Estos 2,09 millones de personas, englobadas bajo la etiqueta de ‘paro oculto’, representan la cifra más baja en España desde 2009, pero, como contraparte, también es la más alta de Europa. Es decir, la peor aprovechada. Tras la pandemia, ha bajado un 7,8% interanual, más de cuatro veces más de lo que ha caído el paro convencional, que se redujo un 1,8%.
Holgura laboral
Precisamente, la llegada del nuevo coronavirus y la realidad laboral que definió por obligaciones contextuales como los confinamientos o las restricciones sanitarias, forzaron a crear estas figuras que componen el ‘paro oculto’ y que se recogen dentro de la conocida ‘holgura laboral’, una estadística complementaria a la Encuesta de Fuerza Laboral que realiza Eurostat con datos del INE.
A diferencia del término población activa que usa la Organización Internacional de Trabajo (OIT) en su Encuesta de Población Activa (EPA), y que engloba a aquellos que buscan activamente empleo sin encontrarlo y están dispuestos a incorporarse inmediatamente a un puesto, la ‘holgura’ se enfoca en la poca utilización de la fuerza laboral de un país, teniendo en cuenta a aquellos que se ven expulsados de la actividad.
Así, la ‘holgura laboral’ también tiene en cuenta a los desmotivados, aquellos que buscan pero se han desanimado a ello por diferentes motivos como personales o ambientales, además de los infraempleados, los que se ven obligados a trabajar pocas horas ya que no encuentran mejores condiciones y jornada. Al respecto, destaca que España tiene la tasa de infraempleados más notable de Unión Europea con el 4,5%, solo superado por los 5,2% de Países Bajos.
España progresa adecuadamente
Una polémica, la del conteo del número de parados, que pareció desactivarse pero que se ha visto reflotada por la reforma laboral y la introducción de la figura laboral del fijo discontinuo, que aunque son indefinidos pueden pasar varios meses al año sin trabajar porque su ocupación se liga a actividades eventuales o estacionales. Esta nueva modalidad de contratación, la estrella desde la nueva legislación, no ha provocado que España aumente su ‘holgura laboral’.
Específicamente, los desempleados desanimados se han reducido un 12% y los infraempleados, un 8,5%. Aunque los no disponibles se han elevado un 11% y llegan a 257.000, el máximo de la serie histórica. De esta manera, la ‘holgura laboral’ alcanza el 20,8%, el mínimo de la serie histórica.
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