
Los niños con altas capacidades suelen encontrar dificultades a la hora de integrarse en el aula ordinaria, bien por sus nuevos compañeros o por los docentes. Por eso, muchos centros cuentan con equipos de apoyo y orientación educativa que les ayudan a motivarse y desarrollar sus capacidades únicas. Muchos de estos docentes, sin embargo, no entienden que un pequeño con altas capacidades de aprendizaje (lo que antes se llamaba superdotados) puede tener un comportamiento poco convencional en muchas ocasiones.
Esto es lo que pasó en un colegio de Niza en la escuela Cours Privé Cyrano que está especializada en niños PAI (con alto potencial intelectual). Muchos de ellos llegan de escuelas infantiles tradicionales, donde no se ha trabajado con ellos específicamente y aun así, muestran habilidades increíbles en el cálculo o el lenguaje. Hace casi un año, la maestra Mariette Bousquet, directora de este colegio de Primaria, explicó en Le Figaro un caso que llamó la atención del equipo docente.
Expulsado de clase porque dijo una palabra ‘desconocida’
Un niño de cinco años con altas capacidades que estaba en su clase, fue expulsado porque la maestra pensó que la estaba insultando. Y nada más lejos de la realidad. El alumno conocía más de 3.000 palabras, muchas de ellas poco usadas en el día a día, y tuvo que ser su madre la que diese las explicaciones en el centro al enterarse de lo que había pasado.
“En una conversación entre la maestra y los niños de la clase, su hijo pronunció una palabra que la maestra no comprendió y pensó que estaba insultándola. Entonces le expulsó de clase”.
Una vez que se analizó el caso, Bousquet explicó en este medio digital que la interpretación que hizo la docente “no pudo ser más errónea”. Los pequeños estaban realizando la asamblea de todas las mañanas, que trabaja sobre los gatos. La profesora explicaba que están capacitados para ver de noche.
Entonces, el niño levantó la mano y dijo “ellos son nictálopes”. La maestra pensó que era un insulto y nada más lejos de la realidad. Con esta palabra se hace referencia a los animales que ven mejor por la noche que durante el día. Y es cierto que no se trata de una palabra que se emplee a diario, sino que es técnica y se usa en medicina o biología.
El niño conocía más de 3.000 palabras, algunas ‘raras’
La psicóloga Pauline de Saboulin que cuenta con varios estudios y libros publicados sobre altas capacidades, niños y colegio, explicó que “a medida que los ‘superdotados’ crecen, desarrollan un vocabulario más variado y rico que el que tienen los niños de su edad”. En estos casos, construyen y desarrollan frases poco habituales, producto en muchas ocasiones de pasar tiempo leyendo e investigando.
“Un niño que cumple 6 años y llega a Primaria normalmente conoce 6.000 palabras. Entre aquellos que tienen un alto potencial intelectual, la cifra se acerca a las 9.000 y en los que presentan dificultades a 4.000”. En el caso de este pequeño expulsado de clase, “había adquirido el vocabulario de forma multifactorial ya que leía mucho y todo tipo de libros”.
Además, no les cuesta trabajo investigar. Cuando encuentran una palabra extraña para ellos y no saben qué significan, la buscan en diccionarios, otros libros o dispositivos electrónicos. “Entre los alumnos del colegio se han visto algunos que hablaban empleando palabras como ‘hipótesis plausible, cautivador o estrategia”, destaca la directora del centro.