Dos de cada tres jubilados autónomos no llegarán a los 1.000 euros mensuales en 2025 mientras que los asalariados superarán los 1.600 euros

Malas noticias para los trabajadores y jubilados autónomos. En 2025, las pensiones contributivas de jubilación subirán un 2,8%, mientras que las pensiones mínimas y máximas lo harán por encima de dicho valor. A pesar de esta subida, los jubilados que cotizaron bajo el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) serán los que menos lo notarán. Si aplicamos este incremento a los últimos datos publicados por el Ministerio de Seguridad Social, la pensión media se situará en 993,82 euros mensuales, siendo este un incremento de 27,07 euros con respecto a la última cifra publicada. Además, dos de cada tres pensionistas no alcanzarán los 1.000 euros al mes.

Así, se puede decir que la pensión de los autónomos es la más baja del sistema (sin contar las pensiones SOVI, ya que pertenecen al anterior sistema a la Seguridad Social). Por ejemplo, para la pensión de jubilación dentro del Régimen General se situará en los 1.651,54 euros en 2025, lo que supone una diferencia de 657,72 euros mensuales o de 9.208,08 euros anuales.

La situación se vuelve aún más llamativa si nos fijamos en el Régimen de la Minería del Carbón, donde la pensión de jubilación se situará en 2.889,30 euros al mes en 2025. La diferencia en este caso asciende a 1.895,47 euros mensuales, lo que equivale a 26.536,58 euros anuales. Hay que decir que este régimen es el que más cobra de jubilación.

En el Régimen de Accidentes de Trabajo, la pensión media será de 1.563,08 euros mensuales, es decir, 569,25 euros más al mes que la de un trabajador autónomo. Por otro lado, las derivadas de Enfermedades Profesionales alcanzarán los 1.967,64 euros mensuales, con una diferencia de 973,81 euros al mes respecto a los autónomos. Por su parte, el Régimen de Trabajadores del Mar tendrá una pensión media de 1.649,15 euros al mes, superando en 655,32 euros mensuales la de los autónomos.

Por tramos

Si analizamos las pensiones por tramos, se puede observar que el 65,26% de los pensionistas dentro del RETA cobra una pensión inferior a los 1.000 euros, es decir, 2 de cada 3 jubilados, lo que representa un total de 877.204 personas. Si nos centramos en aquellos que perciben el actual salario mínimo interprofesional (SMI), el porcentaje asciende al 78,23%, equivalente a 1.051.614 personas.

La diferencia es notable si lo comparamos con el Régimen General, donde solo el 32,77% de los pensionistas recibe una prestación inferior a los 1.000 euros (1.586.431 personas), y el 40,34% percibe una pensión equivalente al SMI (1.952.792 personas). En el caso del Régimen de la Minería del Carbón, solo el 3,33% cobra una pensión inferior a los 1.000 euros.

Por provincias

Si miramos al mapa por Comunidades Autónomas y por provincias, vemos que las pensiones de jubilación más altas para los autónomos se encuentran, sin duda, en el norte de España, donde históricamente las rentas y la actividad económica han sido más elevadas. El País Vasco encabeza la lista, con una pensión media de 1.184,16 euros al mes, destacando Gipuzkoa, donde los jubilados autónomos perciben 1.219,42 € euros, la cifra más alta del país. Le siguen de cerca Navarra, con 1.133,15 euros, y la Comunidad de Madrid, donde la pensión media alcanza los 1.076,74 euros. Estas comunidades, más industrializadas y con un mayor peso económico, reflejan la capacidad de sus trabajadores autónomos para cotizar durante su vida laboral con bases más elevadas.

En el otro extremo, las pensiones más bajas se concentran en zonas del noroeste y en algunas regiones insulares, donde las oportunidades laborales y los ingresos han sido tradicionalmente más limitados. Galicia presenta las pensiones más reducidas del país, con una media de 858,35 euros al mes. En provincias como Ourense y Lugo, la situación es aún más preocupante, con pensiones que apenas llegan a 815,52 euros y 818,42 euros, respectivamente.

Las Islas Canarias también se sitúan entre las regiones más desfavorecidas, con una media de 895,45 euros, siendo Santa Cruz de Tenerife la provincia con la pensión más baja, con solo 870,00 € euros mensuales. Entre estos dos extremos, hay regiones que se sitúan cerca de la media nacional de 993,83 euros, como Castilla y León y Andalucía. Aun así, dentro de estas comunidades también hay diferencias importantes. Por ejemplo, en provincias como Jaén (951,74 euros) o Málaga (950,88 euros), las pensiones siguen estando por debajo de la media.

Por qué los autónomos cobran una pensión tan baja

La principal razón de la diferencia entre la pensión de un autónomo y la del resto de trabajadores radica en las cotizaciones que ambos aportan a la Seguridad Social. Actualmente, la base mínima de cotización para un autónomo se sitúa en 950,98 euros, mientras que la de los trabajadores asalariados alcanza los 1.323 euros, según la Orden PJC/281/2024.

Además, si miramos al informe anual de 2023 del Ministerio de Trabajo y Economía Social (disponible a través de este enlace), vemos que el 86,6% de los autónomos cotiza por la base mínima durante gran parte de su vida laboral. Esta situación hace que la cuantía de las pensiones que reciben al jubilarse, sea más baja, ya que cotizan por una base muy baja. Aunque es cierto que la mayoría de los autónomos, en concreto el 97,1%, opta por aumentar su base de cotización a partir de los 55 años, este esfuerzo suele resultar insuficiente para compensar los años previos en los que cotizaron por la mínima.