Buenas noticias: padecer esta conocida enfermedad será motivo suficiente para cobrar la incapacidad permanente total

Para cobrar una pensión de incapacidad permanente de la Seguridad Social no siempre hay que sufrir una lesión física. A pesar de que no hay una lista oficial, sí que existen enfermedades profesionales y comunes que derivan en esa pensión contributiva. Es el caso de una conocida enfermedad por la que el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria ha concedido una incapacidad total para la profesión habitual a un auxiliar de enfermería.

Todo ello derivado de que el Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), es decir, el Tribunal Médico de la Dirección Provincial de la Seguridad Social, le ha otorgado a este trabajador un grado de discapacidad superior al 33%, como recoge la sentencia dada a conocer por Europa Press.

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En este texto, la Sala de lo Social del TSJC permite este reconocimiento de la pensión a un responsable del trabajo de auxiliar de enfermería al padecer una enfermedad que le incapacita para estar al mando de esta unidad tan importante dentro del sector sanitario.

¿Cuál es la enfermedad y cómo se ha llegado a esa situación?

La enfermedad que ha desembocado en el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente ha sido la esquizofrenia. Ante esta dificultad para desarrollar la profesión habitual, decidió acudir a que se le reconociera dicha pensión.

Ante la negativa inicial de la administración, el Juzgado de lo Social número 4 de Santander, aceptó parcialmente la reclamación presentada por el afectado contra el INSS y la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS).

Con la resolución ahora emitida por el Tribunal Superior de Justicia, tanto el INSS como la TGSS tienen en deber, equivalente al 55% de una base reguladora, con carácter retroactivo a septiembre de 2021. La prestación se concedió al demandante, quien en ese momento sí que gozaba de una discapacidad del 37% por tener episodios psicóticos.

Los magistrados han tenido en consideración que a pesar de que la esquizofrenia es posible controlarla fuera de los periodos de crisis, su efecto invalidante puede manifestarse en situaciones que requieren una alta precisión mental, como es en este caso. 

Finalmente, y tras no renovar su contrato laboral, el interesado decidió acogerse a la pensión alegando que “se sentía desorientado, juzgado y afectado por una presión mental en exceso”, por lo que no se veía nada capacitado para ejercer con tranquilidad su trabajo.

¿Qué avances trae este caso para todos los afectados por la enfermedad?

Para todos los afectados por esquizofrenia o cualquier otra dolencia mental esto supone un gran avance. Como queda recogido en la sentencia y sí que se pueden generar limitaciones en el desempeño de varias profesiones, lo que es una buena noticia el acceso a la pensión de incapacidad permanente para la profesión habitual.