“Nunca hagas esto”: el error que cometen muchos trabajadores y puede marcar la diferencia
Un abogado laboralista explica un error que cometen mucho los trabajadores al reclamar y que es clave para que el despido se declare nulo.
Un abogado laboralista explica un error que cometen mucho los trabajadores al reclamar y que es clave para que el despido se declare nulo.
El Tribunal Supremo admite que la empleada violó las normas internas de la empresa y del Convenio Colectivo de Grandes Almacenes por lo que el despido es disciplinario y procedente.
El juzgado considera que la indemnización por despido improcedente que recoge la norma española es insuficiente en este caso para reparar el daño causado, siguiendo la doctrina europea.
Su empresa la despidió tras mostrarse disconforme en el grupo de WhatsApp de todas las horas extra que realizaba.
El TSJ de Galicia da la razón al Banco Sabadell y declara procedente el despido disciplinario de un empleado que accedió sin autorización a las cuentas bancarias de compañeros y familiares, incluida la de su cuñado.
La trabajadora explica que es un despido encubierto por su incapacidad para trabajar en su puesto y lo pondrá en manos de la justicia.
El Consejo de Europa aconseja que la indemnización tenga en cuenta el “daño real” y las circunstancias personales de cada trabajador.
“Se ha copiado una carta de despido de otra empresa, se ha bajado el modelo de internet, o se ha confiado su redacción a la mal llamada IA”, denuncia el tribunal. "Es el colmo de la dejadez".
El Tribunal Supremo declaró el despido nulo, no por llevarse objetos sin pagar, sino por no respetar los derechos fundamentales de la trabajadora.
La baja voluntaria por modificación sustancial de las condiciones de trabajo permite cobrar una indemnización y solicitar la prestación por desempleo.
El TSJ de Castilla y León estima que el ECYL incurrió en fraude de ley al contratar temporalmente a una trabajadora para funciones estructurales y permanentes.
El abogado laboralista Ignacio de la Calzada desvela varios trucos que usan las empresas para no pagar la indemnización por despido. O al menos al completo.
La justicia no considera que el hecho de comerse una sola croqueta, que iba a la basura, constituya una falta muy grave para justificar el despido como defendía la cadena.
El economista aboga por “hacer un traje a medida” a las compañías que inviertan en España y creen buenos puestos de trabajo, y defiende que el país tiene profesionales muy preparados.
La justicia avala el despido disciplinario por indisciplina, trasgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza.