Cuando ya creíamos haberlo visto todo en lo que a viviendas prefabricadas se refiere, llega un espectáculo en cuanto a arquitectura y sostenibilidad: las casas modulares construida a base de 24 capas de cartón reciclado procedente ni más ni menos que de cajas de verduras con un diseño contemporáneo. Como lo oyes. La encargada de llevar a cabo este proyecto respetuoso con el medio ambiente ha sido la innovadora empresa holandesa Wikkelhouse.
Y es que para sorpresa de muchos, el cartón es un material resistente a diferencia de lo que pueda parecer en un principio, aunque justo en este momento sé lo que te estás imaginando. No es la casa del cuento de los tres cerditos y tampoco se va a destruir si el lobo le sopla con fuerza. Todo lo contrario. La estructura de esta casa modular es 100% biodegradable, ya que cada capa está adherida con un pegamento ecológico, lo que además permite crear un gran aislamiento termo-acústico.
Pero la cosa no acaba ahí, porque la duración mínima es de 50 años. Es más, sus dos socios y fabricantes aseguran que con un buen mantenimiento es posible que su duración pueda llegar hasta los 100 años. En cuanto su precio, es bastante más barata que lo que puede costar un hogar convencional en el actual mercado de la vivienda y parte desde los 40.000 euros. Aunque a esta cantidad de dinero inicial, habría que sumarle IVA, transporte e instalación.
Las ventajas de instarlarse en una vivienda prefabricada de cartón
Uno de los mayores puntos fuertes de instalarse en una casa prefabricada a base de este sorprendente material es que debido a su gran ligereza gracias a su peso, teniendo en cuenta que cada segmento solo pesa 500 kilos, permite que durante su producción no se necesite cimentación, lo que se ve reflejado en la posibilidad de instalar la casa en apenas un solo día sobre el terreno escogido.
Otro aspecto a tener en cuenta es que cada Wikklelhouse consiente en la suma de segmentos de 1,2 metros de profundidad y 5 metros cuadrados de superficie que a su vez pueden eliminarse fácilmente. Por lo tanto, la flexibilidad es máxima, ya que permite que se adapte fácilmente a las necesidades y gustos de cada cliente a largo plazo.
Pero ahora viene la mala noticia y es que si ya estabas pensando en adquirir una de estos espectaculares hogares, por ahora solo está disponible en algunos países europeos como Alemania, Holanda, Bélgica, Francia o Luxemburgo. De hecho, ya han cruzado la frontera y la marca de origen holandés ya trabaja en colaboración con una compañía local de Chile para instalarlas en los frondosos y verdes bloques del país de América del Sur.
Pero, ¿te has quedado con ganas de probar una de estas casas prefabricadas en sintonía con la naturaleza más profunda? No hay problema. La multinacional ofrece la posibilidad de alojarte en una de ellas, en forma de hotel o cabaña de lujo, a través de su página web.
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