Un joven encuentra en tan solo unas horas 7 anillos de oro en una playa española con su detector de metales

Las playas españolas esconden grandes tesoros y no solo por riqueza del fondo marino o lo que se puede disfrutar en ellas durante las vacaciones, sino porque buscando bien se pueden encontrar auténticas joyas perdidas. Justo esto le ha pasado a un joven, que explorando una playa ha encontrado hasta 7 anillos de oro en tan solo unas horas, uno de ellos de 19 quilates. 

Y es que los detectores de metales pueden ser muy útiles a la hora de encontrar tesoros ocultos, y este joven español lo demuestra a menudo a través de su cuenta de la red social TikTok ‘Metalesbajolaarena’, en la que muestra las piezas que encuentra en el fondo del mar. 

En unas pocas horas llega a encontrar más de 7 anillos de oro

Aunque el botín que encuentra este joven depende del día, en algunas ocasiones consigue encontrar joyas de oro en el fondo de mar, como en esta ocasión en la que en 4 horas llega a encontrar hasta 7 anillos de oro de diferentes quilates, entre los que hay alguno de hasta 19. 

Además de oro o algunas joyas, ese joven también encuentra muchas monedas pérdidas, entre las que asegura, muchas de peseta, unas piezas que se revalorizan con el tiempo y que algunas de ellas puede tener un gran valor en el mundo del coleccionismo. 

Unos hallazgos que generan controversia 

Entre los comentarios de estos videos mostrando los tesoros que encuentra en las playas españolas también hay lugar para polémica, y es que algunos usuarios cuestionan el hecho de que el joven se quede con las joyas que encuentran, señalando que debería llevarlos a las autoridades y entregarlo como un objeto perdido. 

El uso de detectores de metales en las playas españolas está regulado por la Ley y dependerá de cada Comunidad Autónoma que su uso esté o no permitido o limitado. Aunque en la mayoría puede hacerse uso, en algunas como Valencia o Andalucía existen ciertas restricciones y habrá que pedir permisos para poder utilizarlos. 

Como norma general, este tipo de dispositivos no podrán usarse en zonas arqueológicas o declaradas Bien de Interés Cultural (BIC), en Parques Naturales o en propiedades privadas, a no ser que se tenga permiso del propietario para hacerlo.