Hacienda tiene en el punto de mira a los propietarios de viviendas, y es que igual que vigila que declaren de forma correcta los ingresos que reciben por el alquiler de sus propiedades, también revisa las operaciones de compraventa. Concretamente, la Agencia Tributaria, además de controlar los impuestos que se pagan por estas operaciones, lo hace con el precio de venta, y establecer un importe demasiado bajo puede suponer multas de hasta 100.000 euros.
Y no es que el Fisco tenga interés en que suba el precio de los inmuebles, pero un importe demasiado bajo puede hacer saltar las alarmas de una posible evasión fiscal. Por ejemplo, de una donación encubierta, en la que en un padre en vez de donar una vivienda y tributar en el impuesto de donaciones, se encubra esta donación como una venta, pero el importe a pagar sea demasiado bajo.
Por este motivo, la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) investiga las operaciones de compra venta de vivienda, cuando el precio de venta de las mismas está ciertos límites por debajo del valor de mercado del inmueble.
Multas de hasta 100.000 euros por vender una vivienda demasiado barata
A la hora de determinar qué cuál es el importe mínimo por el que se puede vender una vivienda para evitar estas sanciones, hay que tener en cuenta el valor de mercado de los inmuebles. Los expertos del portal inmobiliario Idealista, aclaran que Hacienda fija los siguientes límites para establecer sus sanciones:
- Precio entre el 10% y el 5% inferior al valor real de la vivienda: se considera una sanción leve con multas de entre 1.000 y 10.000 euros.
- Precio inferior al 5% del valor del inmueble: se trata de una sanción grave y el importe de las multas oscilan entre los 20.000 y los 100.000 euros. Podría incluso suponer penas de entre 6 meses y 2 años de prisión.
De este modo, si el valor de mercado de la casa que se ha vendido es de 100.000 euros, estos serían los importes sancionables:
- Sanciones leves (1.000 a 10.000 euros): si la operación se realiza por un precio de entre 10.000 euros y 5.000 euros.
- Sanciones graves (20.000 a 100.000 euros): si el precio es menor a 5.000 euros.
