El Gobierno de España, a través del Ministerio de Hacienda, ya aprobó una retención para la declaración de la Renta de 2023 de entre 22.000 y 35.200 euros anuales por una rebaja en la retención de los sueldos a partir de 22.000 euros. Aunque en ese momento fue una ventaja, como apuntan desde elEconomista, ahora podrá ser un susto para aquellos contribuyentes incluidos en ese rango de ingresos.
Como apuntan desde el citado medio, ahora los trabajadores en la próxima campaña de la Renta 2024 podrían ver cómo Hacienda les obligaría a devolver entre 400 y 900 euros a partir del próximo 3 de abril. Esta cantidad oscilará entre esas cifras según las cargas familiares y las rentas.
Pero, ¿cuál es la razón? El motivo es que cuanto menor sea la retención que practique la empresa sobre el salario, mayor será el ajuste que tenga que hacer el contribuyente en la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para abonar a Hacienda lo dejado de ingresar durante el ejercicio.
Partiendo de esta base, el Gobierno modificó el Reglamento del IRPF en diciembre de 2022 para aplicar un límite máximo, para que tuviera efectos en 2023. Y efectivamente, se aplicó a los sueldos desde 22.000 euros (cuando comienza la obligación de presentar el borrador si se tiene un pagador) hasta los 35.200 euros. Pero se retuvo menos según el tipo de unidad familiar.
¿Quiénes son los contribuyentes que se verán afectados en la declaración de la Renta?
En la próxima campaña de la Renta, visto lo anterior, los contribuyentes que se verán más afectados serán aquellos en los que el salario sea menor a los 35.000 euros y tengan más cargas familiares que otros. Precisamente, porque son estos a los que menos retuvo la empresa por dicho gravamen.
Por el contrario, entre los menos perjudicados están quienes se acerquen a ese máximo y menos cargas familiares tengan, puesto que la retención será mayor o, incluso, no tendrían que abonar nada a la Agencia Tributaria.
¿Cómo saber si tengo que pagar en la declaración de la Renta?
Para saber si la declaración de la Renta sale positiva, es decir, que el contribuyente está obligado a pagar, hay que fijarse en el signo de la cifra que aparece en la casilla 595 denominada ‘Cuota diferencial’. En caso de aparecer con signo positivo, significa que hay que abonar al Fisco la cantidad indicada en la misma.
Si aparece negativo, será la administración pública tributaria la encargada de abonar dicha cantidad; mientras que si no aparece nada, no hay ni que pagar ni esperar ningún dinero.
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