Son muchos los trabajadores autónomos que en plena campaña de la Renta 2023 ultiman la recopilación de sus ingresos del ejercicio económico anterior para enfrentarse al Impuesto sobre las Rentas de las Personas Físicas (IRPF). Antes de presentar el borrador de la declaración de la Renta intentan informarse sobre cuáles son los gastos que pueden deducirse, algo que se explicará más adelante.
Desde el pasado 11 de abril, los trabajadores por cuenta propia tienen la oportunidad de presentar el modelo 100 a través de Internet, aunque desde el 3 de mayo tienen habilitado un teléfono para solicitar cita previa y presentarlo por teléfono. Quienes quieran presentarla de forma presencial en las oficinas provinciales de la Agencia Tributaria deben esperar hasta el mes de junio.
Los que aún no lo hayan presentado tienen la opción de consultar el simulador de la Renta Web Open. Hay que recordar que, a diferencia de los trabajadores asalariados, los autónomos tienen que presentar la declaración siempre que el año anterior obtuvieran unos ingresos iguales o superiores a los 1.000 euros.
¿Cuáles son los gastos deducibles para los autónomos en la declaración de la Renta?
A diferencia de los trabajadores desempleados, los trabajadores por cuenta propia tienen una mayor cobertura de deducciones en la declaración de la Renta, por lo que hay más gastos deducibles a ojos de Hacienda. Corresponde con los siguientes:
- Las cuotas mensuales que se pagan a la Seguridad Social para las cotizaciones de prestaciones.
- Los sueldos de los empleados.
- Los gastos de consumo de explotación.
- Los gastos de conservación y reparación.
- Los gastos derivados de la contratación de los empleados: seguros, indemnizaciones, regalos…
- El alquiler del local o la oficina y los gastos del alquiler o renting de coches de empresa. Cuando el hogar habitual sea el centro de trabajo, pueden deducirse los gastos de Internet, teléfono, electricidad y agua.
- Los gastos profesionales externos, como los de asesoría o gestoría.
- Los servicios externos que habitualmente se contratan para llevar a cabo el trabajo. Por ejemplo, cuando se contrata a una empresa de limpieza.
- Los impuestos deducibles como pueden ser el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) o el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).
- Los seguros médicos del trabajador por cuenta propia y de las personas que estén a su cargo menores de 25 años.
- Las comidas que tengan el concepto de dietas hasta un máximo de 26,67 euros al día. Cifra que puede subir hasta los 48,08 cuando provengan de comidas en el extranjero.
- Los gastos de formación y de inversión para mejorar la actividad laboral.
Las novedades en materia fiscal que afectan a los trabajadores autónomos en la declaración de la Renta 2023
Una de las principales novedades a las que se tienen que enfrentar los trabajadores cotizantes en el RETA de la Seguridad Social tiene que ver con el impuesto de sociedades para quienes tengan una facturación menor al millón de euros. Así, el gravamen pasa del 25% al 23%.
Aquellos que tengan una facturación mayor a los ocho millones de euros están obligados por el Ministerio de Hacienda, desde el 1 de enero de 2023, a presentar toda la facturación de forma electrónica en la administración. Un paso más para evitar el fraude fiscal y un mayor control por parte de los inspectores de la Agencia Tributaria.
Entre estas novedades está incluida la recuperación del IVA de las facturas impagadas. Aquí cambia la forma en la que se producirá esa reclamación. Ya no será por vía judicial, sino que esa misma reclamación tiene la condición de impagada.
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