El truco definitivo para deshacerse del hielo acumulado en el congelador en pocos minutos

Las tareas del hogar en ocasiones pueden resultar tediosas. Si bien disfrutar de un hogar limpio y ordenado hace en cierta medida la vida mucho fácil, dedicar mucho tiempo a las tareas domésticas no siempre es posible. Y es que, aunque cada vez hay más métodos de limpieza exportados de países como Japón, algunas tareas pueden resultar muy molestas, como por ejemplo quitar el hielo que se produce en el congelador. 

Este hielo, además de provocar que se tenga menos espacio para colocar los alimentos, también influye en el funcionamiento del frigorífico, haciendo que sea mucho menos eficiente, y que incluso se llegue a consumir más energía. La nevera no es el electrodoméstico que más consume en una casa, pero no tenerla en buenas condiciones puede hacer que aumente la factura. 

Las formas habituales de eliminar los bloques de hielo del congelador, suelen ser dejar que el mismo se descongele por completo, o eliminarlos de forma manual con una espátula. Ambas opciones pueden suponer invertir mucho tiempo, y en el segundo caso, estropear el electrodoméstico, si el hielo está muy adherido. Para evitar este problema existe un sencillo truco con el que se podrá realizar en muy poco tiempo y sin apenas esfuerzo. 

El truco para eliminar las placas del hielo del congelador rápido y sin mucho esfuerzo

Lo mejor de este truco es que además de ahorrar tiempo y esfuerzo, se puede hacer con pocos materiales y todos se encuentran con facilidad en cualquier casa. Para ello tan solo se va a necesitar una olla con agua hirviendo y papel de aluminio. 

Desde Linternaute, explican que para descongelar las placas de hielo del congelador, lo primero que habrá que hacer será cubrir las paredes del mismo con papel de aluminio. 

Una vez que estén bien cubiertas, asegurándose de haber tapado bien las zonas en las que hay hielo acumulado, tan solo habrá que introducir la olla con el agua hirviendo dentro del congelador y cerrar la puerta. 

El papel de aluminio es un gran conductor del calor, y al introducir la olla con agua caliente hará que el calor que esta desprende se expanda rápidamente por el interior del electrodoméstico. 

Pasados unos minutos, se podrá abrir y desprender las placas de hielo con cuidado y sin apenas esfuerzo, ya que estas se habrán derretido en parte y serán mucho más fáciles de quitar.