La multinacional Lidl es una de las empresas líderes en materia de empleabilidad en España y así lo demuestran sus datos, con más de 17.000 trabajadores en plantilla, aunque también lo hacen visible con hechos. La compañía alemana acaba de inaugurar varias tiendas en Madrid, Palma de Mallorca y Bilbao en lo poco que va del año 2022 y prevé que esta cifra alcance los 150 nuevos establecimientos antes de 2024. Por lo que no es de extrañar que su bolsa de trabajo se renueve y actualice de forma constante en búsqueda de nuevos empleados.
Lo cierto es que son muchos los interesados en formar parte de esta cadena de supermercados, entre otras cosas por las buenas condiciones laborales que ofrece a sus empleados, que se suman a unas retribuciones salariales de entorno a los 1.200 euros al mes. Por lo que si se quiere superar uno de sus procesos de selección, el grupo de origen alemán ofrece a través de sus redes sociales, como lo ha hecho recientemente en LinkedIn, algunas recomendaciones para hacer brillar la candidatura que harán que se diferencia del resto de candidatos de cara a trabajar en sus locales dedicados al sector de la distribución alimentaria.
Estas son los 4 consejos de Lidl para marcar la diferencia: cómo conseguir empleo en sus supermercados
Entrar al portal de empleo de Lidl y envíar el currículum a una de las plazas disponibles de forma automática. Sin más. Craso error. Si realmente se quiere impactar a los reclutadores del equipo de Recursos Humanos, habrá que personalizar el CV para la posición a la que se inscribe. Pero he aquí la pregunta. ¿Cómo hacerlo correctmente?
Hay que buscar aquellos requisitos claves que se requieren en la oportunidad de trabajo y describirlos en la inscripción justo al principio, de manera que se señale en qué se es bueno y cuáles han sido las tareas y responsabilidades que se han ejercido en ese área. Otra clave pasa por usar la terminología de la empresa.
Por ejemplo, en el caso de esta empresa, a los vendedores/as se les cataloga como "Cajero/a Reponedor". Conviene por tanto estudiar los puntos en común que se tiene con la experiencia profesional para referirse de la misma manera. Esto significa que se ha estudiado la oferta de empleo a conciencia y se está en sintonía con la política de empresa. Si se quiere triunfar de manera estrepitosa y marcar la diderencia, además se recomienda incluir una carta de presentación que hable sobre uno mismo en primera persona.
Esta técnica refuerza el interés demostrado y aporta esos datos extra, como las habilidades sociales o ‘soft skills’, que no se pueden extraer de un CV. Un valor añadido sería explicar cómo se afrontó una situación retadora o que se puede aportar al equipo. Por último, aunque no menos importante, hablar sobre experiencias profesionales pasadas pero con una diferencia, incluyendo aquellos aspectos que se pueden revertir en el puesto que se solicita.
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