Las dificultades para que el proyecto de ley para la reducción de la jornada laboral salga adelante en el Congreso de los Diputados son más que conocidas. Este martes se han manifestado de nuevo tras conocerse que el Ministerio de Trabajo ha decidido retrasar su debate en el Congreso hasta el próximo periodo parlamentario de sesiones en septiembre, debido al ambiente político tras los presuntos casos de corrupción del PSOE y la petición de Junts, quien pidió más tiempo para seguir analizando las propuestas.
Este retraso ha sido avanzado por fuentes ministeriales consultadas por Europa Press, después de que Yolanda Díaz indicara en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el debate debe darse en “las condiciones más favorables”. El objetivo principal de Trabajo era que el debate sobre las enmiendas a la totalidad de la norma, presentadas por PP, Vox y Junts, se produjera antes de que finalizara el periodo de sesiones, es decir, antes de agosto.
De hecho, desde Sumar habían propuesto celebrar un pleno extraordinario el próximo 22 de julio. Este, finalmente, no se va a producir, con la esperanza de acercar posturas con Junts, clave para que la norma pueda ser convalidada en el Congreso de los Diputados y, por ende, llegar a entrar en vigor. Sobre esta entrada, el Gobierno, a pesar de todo, mantiene la esperanza de que se pueda implantar antes de que acabe 2025.
Las peticiones de Junts, según Trabajo
En un documento “consensuado” entre el Ministerio de Trabajo y Junts, al que ha podido acceder Europa Press, la formación catalana habría recalcado su interés por proteger a las pymes, autónomos y trabajadores de Cataluña. Asimismo, pedía “tiempo y seguir trabajando” en esta ley para que se recojan “todas” las peticiones, declarando que “no es posible sin consenso” avanzar en la medida.
Las mismas fuentes habrían asegurado que la petición de Junts les ha hecho decantarse por posponer el debate, por quedar demostrado el interés de dicho partido en trabajar en la medida. Además, destacan que, debido a la situación política actual, el debate podría haber quedado “secuestrado” si se celebraba este mismo mes de julio, temiendo que se convirtiera en un “plebiscito” del apoyo o no al Gobierno.
“Los trabajadores españoles llevan 40 años esperando esta medida, por un mes no vamos a dejar fracasar un proyecto que es esencial para los trabajadores del país”, habrían manifestado desde el departamento de Yolanda Díaz. A pesar de ese retraso, Trabajo señala que es posible que la reducción de la jornada laboral salga adelante este mismo año.
Al respecto, han asegurado que las negociaciones con las formaciones políticas están avanzadas, por lo que no debería haber “dificultades” para superar el debate a la totalidad en el próximo periodo de sesiones. Con Junts en particular, han avanzado en el ‘plan pyme 375’ que el Gobierno ofreció a la patronal durante la mesa de negociación, pero que se retiró al no sumarse esta al acuerdo.
Junts niega haber pedido la prórroga
Por otro lado, fuentes de Junts habrían aclarado a Europa Press que no han pedido expresamente que el debate de totalidad sobre la reducción de la jornada laboral se aplace hasta después del verano, afirmando que ha sido el Ministerio de Trabajo quien ha decidido no incluirlo en el orden del día del Pleno del Congreso previsto para la próxima semana, al ver que no tenía apoyos suficientes para salvar ese primer trámite.
La formación catalana también ha informado que, de haberse celebrado el debate, habrían mantenido su enmienda de totalidad, con la intención de que el texto sea devuelto al Gobierno, y se frene su tramitación legislativa. También han recalcado que siguen “muy lejos” de tener un acuerdo con el ministerio de Yolanda Díaz, pero que “seguirán trabajando” para proteger a las pymes.
