Inmersos en la Campaña de la Renta, a muchos contribuyentes les habrá salido la declaración a pagar. ¿Por qué se produce este resultado? Cuando resulta favorable para la Agencia Tributaria, es porque las retenciones que se nos han ido aplicando a nuestra nómina mes a mes por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) han sido menores de las que correspondía.
Para evitar este desajuste, y que no nos toque pagar a Hacienda al presentar la declaración de la Renta, hay que tener en cuenta que el IRPF es un impuesto progresivo. Esto es, cuánto mayores sean nuestros ingresos, mayores serán también las retenciones que nos tengan que aplicar desde la empresa, que está obligada a hacerlo.
No obstante, la cuantía del sueldo no es el único factor a tener en cuenta a la hora de calcular nuestras retenciones. También influye nuestra situación familiar, si tenemos una discapacidad, la duración de nuestro contrato de trabajo o nuestro lugar de residencia. En lo que respecta a nuestros ingresos, se nos aplica un tipo impositivo según el tramo salarial en el que nos encontremos:
- Menos de 12.450 euros: 19%
- Desde 12.450 euros hasta 20.200 euros: 24%
- Desde 20.200 euros hasta 35.200 euros: 30%
- Desde 35.200 euros hasta 60.000 euros: 37%
- Desde 60.000 euros hasta 300.000 euros: 45%
- Mayor o igual a 300.000 euros: 47%
Ahora, teniendo en cuenta el resto de factores, ¿cómo puedo saber cuánto deben retenerme? Con la calculadora de la Agencia Tributaria.
Calculadora de IRPF de la Agencia Tributaria
Hacienda tiene una calculadora de IRPF que, en la práctica, funciona como un simulador para saber cuáles son las retenciones que nos corresponden teniendo en cuenta nuestros ingresos así como nuestra situación familiar y personal. Por ello, se deben completar los siguientes campos que muestra el programa:
- Datos personales: NIF y año de nacimiento, si se reside en Ceuta, Melilla o la Isla de Palma, si se tiene una discapacidad, si se está casado o soltero y situación económica (trabajador en activo, desempleado o pensionista), entre otros datos.
- Ascendientes y descendientes. Para saber si se tiene personas a cargo.
- Datos económicos: entre otros, debemos informar de nuestros ingresos totales o si tenemos derecho a aplicar alguna deducción.
- Datos de regularización. Aparece un listado de situaciones y debemos marcar si nos encontramos en alguna de ellas.
Al completar todos estos datos, se puede conocer cuáles son las retenciones totales que se nos debería aplicar en la nómina. De ese modo, podemos saber cuánto deben retenernos todos los meses para que la declaración de la Renta no salga ‘a pagar’.
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