¿Conviene rehipotecar una casa ya pagada? Estas son sus ventajas e inconvenientes

Cuando se termina de pagar una vivienda y se cancela la hipoteca, el inmueble queda libre de cargas. Aunque es un momento muy deseado por la mayoría, hay personas que para obtener liquidez vuelven a hipotecar la vivienda tras pagarla, en estos casos muchos se preguntan ¿en qué consiste realmente este proceso? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de hacerlo?

Hipotecar una vivienda en propiedad significa entregar al banco el inmueble como garantía de pago del préstamo concedido. Hay que tener en cuenta que este proceso tiene sus ventajas y desventajas, ya que en caso de impago, el banco podría ejecutar la garantía hipotecaria y quedarse con el inmueble.     

El proceso de rehipotecar una vivienda no resulta más complicado que el de una hipoteca al uso o cualquier otro tipo de préstamos, por lo que habrá que hacer una tasación de la vivienda, presentar la documentación requerida y finalmente firmar ante notario. 

Es importante que antes de optar por un banco u otro, se comparen las condiciones ofrecidas por varios de ellos y opte por las más beneficiosas para formalizar la operación, pero antes de dar el paso conviene tener en cuenta las ventajas y desventajas. 

Ventajas y desventajas de rehipotecar una casa ya pagada 

Hipotecar una vivienda ya pagada ofreciéndola como garantía de pago del préstamo tiene sus pros y sus contras, que develan desde el portal especializado en hipotecas ‘Go Hipotecas’

Ventajas de rehipotecar una casa ya pagada 

• Obtener liquidez. 
• Conseguir tipos de interés más bajos: los préstamos hipotecarios tienen unos tipos de interés más bajos que los préstamos personales. 
• Mayor acceso a la financiación: ofrecer como garantía de pago una vivienda libre de cargas mejorará el perfil de riesgo para los bancos según los expertos. 
• Aprovechar el valor de la vivienda, siendo una forma de sacarle un rendimiento económico sin tener que deshacerse de ella.

Desventajas de rehipotecar una casa ya pagada

• El importe a financiar es limitado, habitualmente se concede entre el 50% y el 60% del valor de la vivienda.
• Los bancos son muy estrictos con los requisitos para conceder estos préstamos. 
• Existe riesgo de que el banco embargue la vivienda en el caso de que no se pueda hacer frente al pago de la deuda.