La revolucionaria idea de Elon Musk como nuevo máximo accionista de Twitter

Elon Musk es el nuevo mandamás de Twitter, la quinta red social más usada del mundo y una de las más influyentes, según el último estudio de Statista. Es el último logro del hombre más rico del planeta tierra, con más de 250.000 millones de euros, y que recientemente se encargó de avisar en una entrevista con ‘Business Insider’ de las principales amenazas a las que se enfrenta la humanidad.

Es innegable que cuando el empresario sudafricano entra en escena, no deja a nadie indiferente. Haga lo que haga, crea tendencia y es noticia. Ya se vio con su anuncio de apostar por las criptomonedas como el ‘bitcoin’ o las ‘dogecoin’, consiguiendo la jornada laboral más lucrativa de la historia, o con su premonición de un mundo con coches voladores, con robots trabajadores y una renta universal igual para todos los seres humanos.

A su historia de película que comenzó con la creación de la plataforma de pago, PayPal, se añade ahora su inmersión en el negocio de las redes sociales, que ya avanzó en el propio Twitter, su escaparate de acción, después de pregonar que están construyendo una nave espacial para viajar a Marte. Poblarlo de vida y dar el primer paso en el Planeta Rojo es otro de sus ambiciosos planes. De esta manera, a los cerca de 80 millones de seguidores que cuenta, se le unen 73,5 millones de participaciones.

Musk dispara la cotización bursátil de Twitter

Ha sido anunciar que se quedaba con el 9,2% de las acciones de la plataforma de ‘microblogging’ y ‘El Pajarito’, volar en Bolsa. Nada menos que un 26%. Y eso solo momentáneamente. El anuncio le coloca ahora con el bastón de mando de la red social. Es decir, es su nuevo CEO, una vez que el cofundador, Jack Dorsey, abandonara dicho rango el pasado mes de noviembre, aunque mantiene una participación del 2,25%. De él, según informaciones de Reuters, se dice que no prestaba atención a Twitter.

¿Y cuánto le ha costado a Elon Musk ser el ‘jefe’ de Twitter? Más de 2.600 millones de euros, que ha pagado a través de su fideicomiso, ‘Elon Musk Revocable Trust’, apenas dos semanas después de que avisara que se estaba "pensando muy en serio" invertir en alguna red social.

Casi un 1% de su patrimonio. También le ha servido de altavoz para retar a Vladimir Putin a un combate o realizar encuestas relativas a sus negocios, como si debería o no vender acciones de Tesla. Aunque también con otros asuntos intrínsecos a la propia red social.

Libertad expresión

“¿Crees que Twitter se adhiere rigurosamente al principio de la libertad de expresión?”, preguntaba a través de ella. “Las consecuencias de esta encuesta serán importantes. Por favor, vota cuidadosamente”, remarcaba. Un 70,4% de los usuarios participantes respondieron que no, e incluso más de uno le animó a comprar Twitter.

Algo que no se descarta a tenor del que sería su siguiente publicación: "¿Hace falta una nueva plataforma?". Su idea es la de dar lugar a una red social con 100% libertad de expresión. “Es esencial para una democracia que funcione”, justifica. Va muy en serio.