El subsidio para mayores de 52 años es una de las prestaciones más beneficiosas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Entre los beneficios se encuentra que se cobra de manera indefinida hasta la edad de jubilación y además cotiza para la pensión de jubilación. A veces surge la duda entre los beneficiarios de este subsidio sobre si es mejor trabajar o seguir cobrando la prestación.
Entre el subsidio y trabajar siempre será preferible trabajar y por varias razones. La primera es, que mientras se trabaja se cotiza para el desempleo, es decir que se genera derecho para cobrar la prestación contributiva por desempleo (comúnmente conocida como el paro).
Además, mientras se percibe la prestación contributiva, el SEPE continúa ingresando las cotizaciones a la Seguridad Social. Para los trabajadores del sector agrario, el organismo cubre el 73,50% de las cotizaciones, quedando el 26,50% a cargo del empleado, que se descuenta de la prestación.
El subsidio cotiza para la jubilación
El subsidio para mayores de 52 años cotiza para la pensión de jubilación por el 125% de la base mínima de cotización vigente, que en 2024 es de 1.653,75 euros mensuales. A pesar de esto, trabajar generalmente supondrá cotizar por una base superior, lo que será más beneficioso para el cálculo de la pensión.
Aunque esta cotización del subsidio pueda parecer adecuada, la base mínima de cotización está fijada en 1.323 euros al mes, como establece la Orden PJC/281/2024 (disponible en el Boletín Oficial del Estado). En la práctica, cuando se está trabajando, la base de cotización suele ser superior. Según los datos más recientes de la Seguridad Social, la base de cotización media se sitúa en 2.191 euros mensuales, lo que supone 537,25 euros más que la base del subsidio. Esta diferencia puede variar en función del puesto de trabajo y el salario.
Así, aunque el subsidio garantice una cuantía fija y cotice para la pensión, siempre será más beneficioso trabajar y cotizar a la Seguridad Social.
Compatibilizar el trabajo y el subsidio
El SEPE permite trabajar y cobrar el subsidio para mayores de 52 años al mismo tiempo. En caso de ser contratados a jornada completa, ya sea con un contrato temporal (superior a tres meses) o indefinido, los beneficiarios pueden seguir cobrando el 50% del subsidio, lo que supone un complemento de 240 euros mensuales. Por ejemplo, un trabajador con un salario bruto de 1.600 euros mensuales recibiría un sueldo neto de 1.360 euros más el complemento del subsidio, alcanzando un total de 1.600 euros mensuales.
Como novedad, a partir del 1 de abril de 2025, el SEPE permitirá cobrar el subsidio y trabajar al mismo tiempo siempre y cuando el período de trabajo no exceda los 180 días. Así lo recoge, la nueva reforma de los subsidios por desempleo Real Decreto-ley 2/2024.
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