La pensión de viudedad sigue sin reforma: más de 300.000 pensionistas que trabajan la perciben

¿Podrá decirse finalmente adiós a la pensión de viudedad para las personas que enviudan y son menores de 65 años? Una duda sobre la mesa que todavía no se ha abordado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, bajo la dirección de Elma Saiz. Desde hace cuatro años, antes de la pandemia, el Pacto de Toledo solicitó que se modificara la legislación. Por el momento, como apuntan desde El Mundo, más de 300.000 personas en edad de trabajar son beneficiarias.

Si se echa un vistazo a los últimos datos ofrecidos por dicho ministerio para el mes de marzo, alrededor de un 95% de los perceptores de la viudedad son mujeres con una pensión media que ronda los 900 euros mensuales. Profundizando aún más, de las más de 10,1 millones de personas que reciben una pensión en España, 2,4 millones recibe la viudedad y dentro de ellas, 317.791 no han llegado a cumplir los 65 años.

Bien es cierto que esta pensión tiene como finalidad cubrir la pérdida de ingresos para personas que al perder a su cónyuge, ex cónyuge o pareja de hecho se quedan sin ingresos al ser dependientes económicamente de los fallecidos, o incluso trabajando, no llegan a ese mínimo de ingresos anuales que la Seguridad Social exige para acceder a esta ayuda contributiva.

¿Cuál es la reforma que planea introducir la Seguridad Social para la pensión de viudedad?

Poniendo el foco en la recomendación decimotercera del Pacto de Toledo, a cumplir por la Seguridad Social, “la reforma integral de la viudedad pasa por acomodar la configuración de la pensión a las nuevas realidades sociales y familiares, así como las circunstancias socioeconómicas de los beneficiarios, a fin de mejorar la protección de los pensionistas sin otros recursos, y de adecuar la protección de los colectivos menos vulnerables”.

Específicamente, el texto pone el punto definitivo en la siguiente cuestión: “La comisión considera que la acción protectora debe concentrarse en las personas beneficiarias de la pensión de viudedad con 65 años o más, cuya pensión es la única fuente de ingresos”. ¿El objetivo? “Garantizarles una situación de renta equiparable a la existente antes del fallecimiento del cónyuge o conveniente”:

Claro, aquí es donde se abre el debate. Porque la finalidad de la Seguridad Social es la de garantizar un sistema de pensiones justo para todas las personas que realmente necesitan esta ayuda contributiva para vivir y que se optimice el destino de ese dinero. No será igual la persona que enviuda, pero que puede trabajar, o las mayores de 65 años que cobren otra pensión, como por ejemplo, la de jubilación.

Esa optimización pasaría por destinar la pensión de viudedad a aquellos con rentas muy bajas, por ejemplo, que no hayan cotizado lo suficiente para una pensión de la Seguridad Social y solo tengan derecho a una pensión no contributiva de jubilación o de invalidez del Imserso.

No hay que perder de vista que esta decisión de modificarla fue aprobada por unanimidad de todos los partidos que integran esa comisión parlamentaria a excepción a Vox, pero, pese a que ya han pasado cuatro años desde su firma y que el Ejecutivo aprobó el pasado año la reforma del sistema público de pensiones, es un tema que no ha sido abordado.

¿Cuándo comenzará la reforma de la pensión de viudedad?

Fuentes de la Seguridad Social consultadas por El Mundo, “el tema no está sobre la mesa”, pero sí que lo tienen pendiente. Se hará en conjunto con la pensión de orfandad, que se debe reforzar. De hecho, la idea es que se reduzcan los potenciales beneficiarios de la viudedad y se puedan ampliar las ventajas de la orfandad.

Radiografía del gasto en pensiones de viudedad en España

En España, cada mes para la Seguridad Social la viudedad supone un 16,5% del gasto mensual total en pensiones. Echando un vistazo al cómputo total, hay 2,35 millones de personas que perciben esta pensión, de las que 2,14 millones son mujeres y 204.837 son hombres, se dice que el 95% son perceptoras. Del total, casi 320.000 son menores de 64 años y 588.870 reciben un complemento a mínimos para poder cobrar la cuantía mínima fijada en cada año.

Justamente, poniendo el foco en las cuantías, la pensión media se sitúa en 894,07 euros al mes. Sin embargo, no hay que perder de vista que en función de la comunidad autónoma donde se resida va a ser un importe mayor o menor. Por ejemplo, quienes viven en País Vasco, Asturias o en la Comunidad de Madrid son las que más perciben (1.085, 1.025 y 1.020 euros al mes de media, respectivamente), mientras las que cuentan con menos ingresos son Galicia (758 euros), Islas Baleares (807) y Extremadura (815).