Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es habitual pasar del calor sofocante de la calle al frío de los espacios cerrados. Estos cambios bruscos de temperatura marcan la temporada estival y, cada año, vuelven los temores sobre el impacto del aire acondicionado en la salud. Pero, ¿es realmente el aire acondicionado el culpable de los resfriados y catarros en esta época?
El médico y anestesista, David Callejón, conocido por divulgar curiosidades y consejos de salud en sus redes sociales, esta vez ha abierto el clásico debate del verano a través de un vídeo en su perfil de Instagram: “¿El aire acondicionado te enferma en verano o es un mito?” Ante ello, el especialista ha desmontado la creencia más extendida sobre este aparato y los catarros estivales, dejando claro que el principal causante “son los virus”.
El problema no es el aire acondicionado, sino cómo lo usamos
Además, el especialista advierte que el aparato no es el culpable directo de que nos pongamos malos, sino el uso que le damos, ya que este “puede favorecer los catarros por tres vías”:
- La primera se da en los ambientes fríos, cerrados y secos, normalmente provocados por el aire acondicionado y que a su vez, “pueden facilitar que los virus se propaguen”.
- La segunda se da por la irritación de las vías respiratorias; en este caso, el aire acondicionado puede provocar síntomas, como dolor de garganta o congestión nasal, “síntomas indistinguibles de catarro y que además pueden facilitar la entrada de virus”, señala Callejón.
- Y la tercera se debe a los cambios bruscos de temperatura, “que pueden hacer que tu sistema inmune funcione peor y te haga más susceptible a las infecciones”.
3 pasos para evitar resfriarse en verano
Para evitar resfriarse y ponerse malo en verano, el médico destaca tres pasos a seguir para usar el aire acondicionado de forma saludable. Estos se resumen en mantener la temperatura “entre 23 y 26º”, evitar que el chorro de aire “te dé de forma directa”, y recomienda “ventilar los espacios cada ciertas horas”, además de usar un “humidificador” si el ambiente está muy seco.
Desde hospitales hasta centros de salud recuerdan cada verano las mismas pautas, ya que son muchos los españoles que cada año sufren dolor de garganta o congestión por el mal uso del aire acondicionado. Pero la advertencia es clara: no es el aparato, sino cómo se usa.

