El país de Europa que aprobó la jornada laboral de 4 días en 2019 y que cinco años después la productividad ha aumentado

Islandia implantó la jornada laboral de 4 días en 2019, una de las peticiones de la llamada Generación Z (jóvenes nacidos al final de los 90). Esta reducción de la jornada laboral a 36 horas a la semana no sólo ha mejorado la salud mental de los trabajadores, sino que ha incrementado la producción. Un argumento que defiende la ministra de Trabajo y Economía Social del Gobierno de España, Yolanda Díaz, para la aprobación de la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas en 2025.

Ya han pasado 5 años y se empiezan a ver los primeros resultados. Uno de ellos, es que esta bajada de tiempo de trabajo de 40 a 36 horas ha originado una fuerte ola de respaldos en distintas empresas. A día de hoy, el 86% de los empleados apoya esta medida. Un número elevado, cuando se tiene en cuenta que en los primeros estudios, sólo el 1% estaba de acuerdo. 

En 2019, finalmente, esta propuesta salió adelante, y se ha mostrado imparable. Aunque no está contemplada todavía como Ley (algo que sí va a hacer en España el Ministerio de Trabajo de Díaz), los trabajadores tienen la opción de negociar las condiciones con sus jefes. 

Semana de cuatro días o reducción de horas trabajadas

Las opciones que pueden elegir los trabajadores islandeses, y que ha sido uno de los puntos a favor para la Generación Z, son la de conseguir una semana de trabajo de cuatro días o alternativas en forma de reducciones de horas. 

En principio, existían ciertos temores a la hora de implantar esta nueva medida, y hay otros países como Japón que buscan también reducir el tiempo de trabajo (en este caso para fomentar la natalidad) o Alemania, que ya no quiere regresar a la convencional de 40 horas.

Lo que señalaba el Gobierno islandés es que recortar el tiempo de trabajo podría afectar a la productividad, o que implantar la medida supondría altos costes adicionales para las empresas. Algo que se parece mucho a lo que reclama la patronal CEOE - Cepyme en España, que ya anunció por medio de su presidente, Antonio Garamendi, que se descolgaba de la mesa de diálogo social donde sí quedaron los sindicatos UGT y CCOO (son los que han firmado el acuerdo con Yolanda Díaz).

Mejor salud mental y menos estrés laboral

El 86% de los trabajadores a los que afecta esta reducción de jornada laboral a 36 horas en Islandia, ha declarado sentirse mejor. Lo que se traduce en una mejora en la salud mental así como en una bajada del nivel de estrés laboral. 

Esto era uno de los puntos más defendidos por la Generación Z, que defendía que sentirse bien en el puesto de trabajo se traducía en un gran bienestar. La clave está en que los hombres se están involucrando más en la vida familiar, descargando a las mujeres. Y que, además, se han abierto los horarios flexibles.

Teletrabajo y empresas más digitales

Las empresas se han abierto a implantar el teletrabajo y a mejorar su equipamiento digital. En Islandia se están manteniendo las mismas condiciones y los sueldos que antes de que entrase esta nueva reforma de la jornada laboral. Lo que sí ha cambiado es la digitalización de las empresas. Cuentan con una mayor eficiencia, que ayuda a los trabajadores ya que fomenta el hecho de que se trabaje desde casa.

Para eso han tenido que mejorar las conexiones a internet convirtiéndolas en más rápidas y con más soporte. Esto se ha producido incluso en las zonas rurales, lo que permite que no decaiga esa conectividad. 

En los institutos, para preparar a los jóvenes a lo que se viene una vez que entren en el mercado de trabajo, se van a impartir clases de tecnología. En el momento en que terminen la carrera, la intención es que entren de lleno en las empresas, cada vez más tecnológicas.