La Seguridad Social da pistas sobre qué preguntas trampas aplica en la incapacidad permanente total

Siempre que un trabajador sufre un accidente o una enfermedad, sea dentro o fuera al ámbito laboral, puede quedar incapacitado para la profesión habitual. Ante esta desprotección, la Seguridad Social intenta cubrir esa pérdida de ingresos con una pensión contributiva. Pero antes, debe pasar por unas preguntas trampa ante el tribunal médico. Estas son los aspectos más frecuentes que necesitan saberse para conceder la pensión de incapacidad permanente total en 2024, aquella en la que se puede trabajar en un puesto diferente al que originó la incapacidad.

La finalidad de una incapacidad perramente es la de cubrir la pérdida de ingresos que sufre un trabajador por la limitación o nulidad total poder trabajar en su profesión habitual. En este tipo de situaciones es posible acceder, o bien a petición del propio trabajador o de oficio, por el órgano de dirección provincial de la Seguridad Social o Instituto Social de la Marina (ISM), como exponen desde la propia web del organismo. La mayoría de ellas derivan de una incapacidad temporal (la baja médica).

El proceso de solicitud para este tipo de pensiones contributivas es distinto a las otras prestaciones bajo la organización de la Seguridad Social. El tiempo de espera para que esta administración dé una respuesta al interesado es 135 días como máximo, aunque no suele ser tan extendido. La carta de resolución de incapacidades se enviará por correo certificado, pero antes, la Seguridad Social enviará un aviso telemático notificándolo.

¿Cuáles son las preguntas trampa del Tribunal Médico en la incapacidad permanente total?

Una vez que la persona acude a la cita del Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), este puede efectuar diferentes preguntas que guardan relación con el puesto de trabajo que desarrollaba y con la vida privada, lo que puede llevar a pensar a que son “preguntas trampa”. Realmente, no es lago que se haga con intención de pillar al enfermo o lesionado, sino que supone una medida de protección para asegurar que el dinero de la pensión va a la persona adecuada y que no hay fraude. Además, el objetivo es valorar la dolencia para determinar un grado de incapacidad igual o superior al 33%. Algunas de estas cuestiones son:

• ¿Has mejorado de tu enfermedad desde que estás de baja? PAra conocer si ha habido mejoras en la salud de la persona solicitante durante la baja, lo que puede afectar la decisión de la concesión de la incapacidad y el grado.
• ¿Cuál es tu puesto de trabajo? Ayuda a medir la autonomía de la persona afectada, lo cual influye en la pensión y su grado.
• ¿Qué tareas hacías en tu trabajo? Se busca conocer el tipo de trabajado que se realizaba para saber en la pensión que grado de discapacidad hay que otorgar.
• ¿Vienes solo o acompañado? Permite medir la autonomía del paciente, lo cual influye en la pensión y su grado.
• ¿Actualmente, cómo te encuentras? Intenta comprender las sensaciones actuales del solicitante debido a su enfermedad.

Estas son las más frecuentes, pero no son las únicas preguntas. Existen otras como las siguientes:

• ¿Podrías indicar cuáles son las dificultades que encuentras a la hora de realizar tu trabajo?
• ¿Cuáles son las actividades diarias que realizas? ¿Estás de acuerdo con lo que la mutua o especialista afirman sobre tus dolencias?
• ¿Cuáles son las etapas por las que ha pasado tu enfermedad o lesión?
• ¿Cómo te afectan los síntomas o secuelas a nivel físico como anímico?
• ¿Cómo estás y cómo te sientes hoy?
• ¿Por qué motivos crees que necesitar el reconocimiento de una incapacidad permanente?

¿Cómo pasar el Tribunal Médico de la Seguridad Social en 2024?

Cuándo el Tribunal Médico llama para conceder una incapacidad permanente total es normal buscar consejos al ser un paso importante por la compensación económica que se podría llegar a obtener. Es crucial no exagerar, pero tampoco ocultar o restar importancia a la dolencia. Estos son algunos factores a tener en cuenta:

• Acudir con toda la documentación y los informe expedidos por profesionales que motiven la necesidad de percibir una incapacidad permanente.
• Mantener la calma, ser sinceros y naturales.
• No evadir las preguntas que formulen el tribunal o mostrarse a la defensiva.
• Cumplir con las órdenes que requiera el tribunal para que pueda valorar la dolencia o patología.
• No engañar al tribunal médico, ya que si de dan cuenta puede perjudicar en el proceso de la concesión de la incapacidad.