De 625 euros para quienes cobren 70.000 a 4.000 para los de 120.000: cómo afecta la nueva ‘cuota de solidaridad’

El próximo 2025 se perfila con un año con bastantes cambios en cuanto a la Seguridad Social se refiere. Este ministerio, bajo la dirección de Elma Saiz, tiene la responsabilidad de materializar la última reforma del sistema de pensiones. Como ya expresó la ministra, hace unos días se implementará la cuota de solidaridad, donde se producirá una cotización extra para los trabajadores con salarios más altos.

Como publican desde El Mundo, el Instituto Nacional de la Seguridad Social exigirá una contribución extra a los afiliados que irá creciendo de forma exponencial conforme aumente el salario de los trabajadores. Se estima que ese intervalo oscile entre los 625 euros, para los que ganen 70.000 euros al año, y los 4.000 euros, para aquellos que ganen 120.000 euros. Como se verá más adelante, esa cifra llegará a más de 30.000 euros para aquellos con sueldos por encima del medio millón de euros.

El pasado 26 de marzo, el Consejo de Ministros aprobó un Real Decreto-ley donde se recogen mejoras en los procedimientos de gestión de la Seguridad Social. Entre esas medidas está la aplicación obligatoria de esa ‘cuota solidaria’ a partir del 1 de enero de 2025. Pero, ¿cómo afectará ahora que acaban de cambiar las bases de cotización de los trabajadores?

Cómo afectará la cuota de solidaridad a los salarios más altos

Una de las medidas que también introdujo la reforma de las pensiones materializada por el anterior ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, fue la subida de las bases máximas de cotización. Esto afectará a aquellos con sueldos más altos, porque cotizarán más, pero al mismo tiempo el porcentaje del gravamen crecerá de forma paralela; por tanto, la retención de la cuota de solidaridad será mayor.

Para entender esta cuestión, se detallará cómo será ese crecimiento y cómo afectará a aquellos con sueldos más altos. La reforma de las pensiones dictaminó que desde 2024, la base máxima de cotización subiera en cada ejercicio económico, por lo que, actualmente, está fijada en 56.646 euros anuales.

Como indica la Ley 8/2015, General de la Seguridad Social, en el periodo de 2024 a 2050, los Presupuestos Generales del Estado deben fijar cada año un tope máximo de bases de cotización en todos los regímenes contributivos “conforme a lo establecido en el artículo 19.3 de dicha norma”.

¿Esto qué significa? Que se actualizará cada año en un porcentaje igual al establecido para la revalorización de la cuantía de las pensiones contributivas, es decir, con la inflación media interanual del mes de noviembre. A ese porcentaje se le sumaría una cuantía fija anual de un 1,2%.

¿De cuánto sería la cuota de solidaridad en 2025?

Echando un vistazo a los datos ofrecidos por El Mundo, han tomado como cálculo la inflación media desde diciembre de 2023 a marzo de 2025 y la han situado en el 3,12%. Además, le han sumado las estimaciones de abril a noviembre de Funcas, por lo que la inflación promedio de 2024 sería de un 3,13%. Si se le suma en 1,2% que marca la ley, el aumento quedaría en un 4,3%.

Tomando como referencia ese último valor, a los trabajadores con salarios más altos se les aplicaría un gravamen de un 5,5%, puesto que la base máxima de cotización ascendería a los 59.081,78 euros anuales en 2025.  A aquellos cuya base se sitúa entre esa cantidad y la base incrementada en un 10% (64.989,96 euros), tendrá una cuota de 325 euros.

Les siguen los trabajadores que ingresen entre 65.000 y 88.622,67 euros, cuyo tipo impositivo será del 6%. Quien tenga un salario de 70.000 anuales asumirá una cuota de 625 euros; mientras que si cobra 88.620 euros, deberá abonar 1.742 euros de más de cuota de solidaridad.

Aquellos que ingresen más de 88.623 euros anuales, el tipo impositivo aplicable por encima de ese nivel será del 7%. Cuanto más alta sea la base, mayor será la contribución, por ejemplo, si gana 500.000, su tipo impositivo será de unos 30.500 euros.