Los temas pendientes que tendrá el nuevo Gobierno en materia de empleo

Pedro Sánchez continúa siendo presidente del Gobierno de España en funciones, a la espera de conseguir los apoyos suficientes para reeditar legislatura de cara al 23 de septiembre, la fecha esperada si se tiene en cuenta el plazo de dos meses desde la primera votación en el Congreso de los Diputados. Las nuevas Cámaras se constituyeron el 17 de agosto. De no poder formarse en septiembre, se repetirían las elecciones generales en Navidad, presuntamente.

El Gobierno de España presentó un Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que incluye políticas de empleo para un mercado de trabajo dinámico, resiliente e inclusivo. El mercado laboral español arrastra desde hace décadas notables desequilibrios que agravan los ciclos económicos, lastran los aumentos de productividad, aumentan la precariedad y profundizan las brechas sociales, territoriales y de género, perpetuando la desigualdad. Este componente impulsará la reforma del mercado laboral español para adecuarlo a la realidad y necesidades actuales y de manera que permita corregir las debilidades estructurales.

Además, el Gobierno afronta todavía la negociación con sindicatos y patronales sobre varios temas pendientes en materia laboral. Entre ellos, destacan la regulación del empleo en plataformas digitales y la mejora de las políticas activas de empleo, la conciliación laboral y el teletrabajo o la lgtbifobia laboral. Los resultados de las elecciones dificultan que cualquier partido forme gobierno sin formar alianzas  con otros partidos. Aún así, el nuevo Ministerio de Trabajo y Economía Social, tiene deberes que afrontar.

Tasa de empleo, regulación del outsourcing, plataformas digitales, jornaleros agrícolas

Uno de los principales es la implantación consolidada de la reforma laboral, que fue publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 31 de diciembre de 2021 con el objetivo de detener la temporalidad y reforzar el contrato indefinido, alterando algunos aspectos que condicionan las relaciones profesionales desde 2012. Esta reforma incluye medidas para combatir la temporalidad y precariedad laboral, a través de cambios en la contratación y desincentivación, y la ampliación del uso de los ERTE para evitar despidos colectivos.

Algunas de las claves de esta reforma son la eliminación de los contratos por obra o servicila configuración de un sistema eficiente de lucha contra la precariedad. Además, también se propone limitar el uso de contratos temporales y potenciar el contrato indefinido, estableciendo que solo se pueda firmar un contrato de este tipo por razones de carácter productivo y organizativo.

Seguir mejorando la tasa de empleo es uno de los principales retos laborales. En este sentido, los 2.677.874 parados y paradas actuales son la mejor cifra desde 2008. Aunque uno de los aspectos más inquietantes es la irrupción de la inteligencia artificial y su progresiva implantación en la red nacional laboral, que amenaza con llevarse por delante muchos puestos de trabajo, como profesores o roles de atención al público. Algo que obliga al sistema de fuerza laboral pública a ofrecer oportunidades laborales de calidad y asistencia para adquirir habilidades y credenciales para los trabajadores. Los empleados, por ello, deben conocer sus derechos, responsabilidades y beneficios conforme a las leyes del país.

La regulación del outsourcing constituye otro tema pendiente en materia laboral. En España, la externalización no está regulada específicamente, por lo que se aplican las normas generales del Código Civil. El reconocimiento de los derechos laborales de repartidores de plataformas digitales se presenta como otro tema apuntado en rojo, como ocurre con choferes y repartidores de plataformas de este tipo.

También se afrontará un nuevo capítulo para los jornaleros agrícolas con la sequía del último año, con la que se han perdido cosechas enteras, la escasez de mano obra o las condiciones laborales de trabajadores extranjeros. Otro aspecto pendiente es la implementación de cuotas de contratación para personas adultas mayores en las empresas.

Garantizar el cumplimiento de las leyes y regulaciones laborales, incluyendo el Estatuto de los Trabajadores es otra de las tareas más generales. Como asegurar que los trabajadores tengan acceso a medidas de seguridad e higiene en el trabajo, poromover políticas de empleo para fomentar la creación de puestos de trabajo y reducir el desempleo, junto a garantizar la igualdad de oportunidades y la no discriminación en el acceso al empleo y en las condiciones laborales.