En España, el impuesto de sucesiones está cedido a las comunidades autónomas, por lo que la cuantía concreta dependerá de la región en la que se encuentre el fallecido. Se trata de un impuesto que grava la transferencia del patrimonio sucesoral por causa de muerte, es decir, a la herencia y/o legado. Son muchos los que dudan sobre ¿cuándo prescribe el impuesto de sucesiones al cobrar una herencia?
La Ley 29/1987, de 18 de diciembre, del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, recoge sus particularidades, como cuánto hay que pagar en cada caso, que dependerá de la cantidad que se herede, y se calcula sumando los bienes y restando las deudas y los gastos testamentarios y de funeral. La cifra general oscila desde el 7,65% hasta el 34%.
Sobre la cantidad que se herede, se pueden aplicar una serie de reducciones estatales, como la reducción por parentesco o la reducción por discapacidad. Además, por otro lado, las comunidades autónomas establecen bonificaciones en la cuota del impuesto, lo que puede variar el gravamen considerablemente de unas a otras. Es decir, no todas las personas tienen que pagar el impuesto de sucesiones, ya que existen exenciones y reducciones que pueden aplicarse.
Herencia: plazo para pagar el Impuesto de Sucesiones y cuándo no hay que pagarlo
El plazo para pagar el impuesto de sucesiones en una herencia puede variar según el país o región. El plazo para pagar el impuesto de sucesiones en una herencia en España es de seis meses contados desde el día del fallecimiento del causante o desde el momento en que adquiera firmeza la declaración de fallecimiento.
Sin embargo, este plazo puede ampliarse por seis meses adicionales si se solicita la prórroga para la presentación de la liquidación del impuesto, aunque Hacienda cobrará interés por hacerlo. Es importante tener en cuenta que la liquidación del impuesto debe presentarse en la Comunidad de Madrid si el fallecido tuvo su residencia habitual en esta comunidad durante la mayoría de los últimos cinco años. Además, es necesario realizar una serie de gestiones antes de presentar la declaración del impuesto de sucesiones, como obtener el certificado de defunción en el Registro Civil.
En caso de no cumplir con el requisito de residencia en la Comunidad de Madrid, la persona que se haya beneficiado de la reducción deberá declarar esta circunstancia a la Administración Tributaria de la Comunidad de Madrid y pagar la parte del impuesto que se hubiese dejado de ingresar, junto con los intereses de demora, dentro de un plazo de treinta días hábiles desde que se produzca el hecho.
En conclusión, el plazo para pagar el impuesto de sucesiones en una herencia en España es de seis meses, con la posibilidad de una prórroga de seis meses adicionales, contados desde el día del fallecimiento del causante o desde la declaración de fallecimiento. Por tanto, el impuesto de sucesiones prescribe a los cuatro años que empiezan a contar seis meses después de la fecha de fallecimiento del causante en España.
Una vez que se ha cumplido ese plazo y no se ha recibido ninguna notificación de la Administración, el impuesto de sucesiones no deberá ser pagado. Sin embargo, es importante tener en cuenta que aunque el impuesto de sucesiones haya prescrito, es recomendable liquidarlo dentro del plazo voluntario para evitar posibles sanciones o recargos.
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