Cuál es la pensión a cobrar si se elige una jubilación activa de la Seguridad Social

Cobrar una pensión de jubilación del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) con una cuantía alta es uno de los mayores sueños de los trabajadores españoles. Aunque, como avisan desde este organismo público, si lo que se va a recibir no es mucho, siempre se podrán acoger a una jubilación activa. Es más, han activado un simulador en el que se estima cómo quedará la pensión en caso de optar por ella. Pero, ¿en qué consiste realmente?

La jubilación activa consiste en una modalidad de jubilación donde se puede compatibilizar el cobro de la pensión contributiva junto a la realización de un trabajo como asalariado o como autónomo. Y es que el objetivo principal es favorecer la continuación de la actividad laboral más allá de la edad ordinaria o legal y permite, además, seguir aportando al sistema contributivo español.

La novedad en este 2022 es que, con la reforma de las pensiones y la entrada en vigor de la Reforma Escrivá se ha introducido un nuevo requisito para acceder a ella. Deberán haber transcurrido al menos un año desde que el solicitante de la pensión haya cumplido la edad ordinaria de jubilación. A pesar de esto, no es la única condición que se impone, sino que hay otras.

¿Cómo comprobar la cuantía de la pensión que se exige en una jubilación activa?

Desde la Seguridad Social se ha puesto a disposición para revisar cómo quedará la pensión con una jubilación activa un simulador. Este estará disponible a través del portal ‘Tu Seguridad Social’, un nuevo servicio que se ha puesto en marcha. Sin embargo, la información se mostrará únicamente en aquellos casos en los que se tenga derecho de cobrar esta modalidad.

Cuando un trabajador quiera hacer la comprobación va a tener que seguir los sencillos pasos que se detallan a continuación:

1. Acceder al portal de ‘Tu Seguridad Social’.
2. Seleccionar el modo con el que se quiere acceder: como interesado o como representante de otro contribuyente.
3. Seleccionar un modo de identificación.
4. Acceder a la opción ‘Simular Tu Jubilación’.

En dicho portal se va a reflejar la fecha de acceso que se tendría derecho para acceder a la jubilación ordinaria (a los 65 años) y en qué condiciones se va a poder hacer. Desde la administración pública se expone que para estimar estas condiciones se tendrá que cambiar la fecha que el simulador muestra y modificarla por la fecha en la que, realmente, el trabajador tiene en mente abandonar el mercado laboral. 

Esto será retrasarla, al menos, un año para que el simulador muestre varias opciones de jubilación activa. Además, también se verá información acerca del complemento económico por jubilación demorada, en caso de cambiar de opinión y acogerse a esa última.

¿Cuáles son los requisitos que debe cumplir el trabajador para acceder a la jubilación activa?

Como para cualquier pensión o prestación de la Seguridad Social, se va a necesitar cumplir con unos requisitos previos para que la administración permita acceder a una jubilación activa. Específicamente, en este caso se van a imponer cinco condiciones previas o términos y se resumen en los siguientes:

• El acceso a la pensión deberá tener lugar al menos un año después de haber cumplido la edad legal de jubilación. En estos casos no se podrán admitir la jubilación anticipada, es decir, que deberá acogerse a la modalidad activa a los 65 años, cuando haya cotizado 37 años y medio o más; o a los 66 años y dos meses, cuando no cumple con este periodo.
• El porcentaje aplicable a la base reguladora tendrá que alcanzar el 100%.
• El trabajo deberá ser compatible con la pensión y podrá ser a tiempo completo o parcial, como asalariado, o como autónomo.
• El importe de la cuantía equivaldrá al 50% del importe resultante en el reconocimiento inicial. Pero si se trata de un autónomo y se acredita tener contratados trabajadores, al menos uno, la cuantía de la pensión podrá llegar a ser del 100%.
• La jubilación activa resulta incompatible con la jubilación demorada. No se podrá cobrar el complemento por prolongación de vida laboral más allá de los 65 años.