Aunque la idea habitual de segunda residencia es la de un chalet de ladrillos cerca de la playa, existen otras alternativas mucho más económicas con las que disfrutar de las vacaciones. Si además tenemos en cuenta que el precio de la vivienda no para de subir, opciones como la de tener una casa prefabricada parecen más que ideales de cara a nuestro bolsillo. Por tanto, este tipo de viviendas son una gran alternativa para aquellos que buscan un lugar donde pasar las vacaciones sin hipotecarse de por vida, ya que es posible encontrar casas prefabricadas desde 20.000 euros en el mercado sin demasiado esfuerzo.
Así es la casa de madera VERA, que comercializa la firma especializada en casas prefabricadas Pineca y está en oferta ahora. La vivienda destaca por su espacio, tanto interior como exterior, ya que tiene más de 130 metros cuadrados pensados para el disfrute. La casa se distribuye en dos plantas y dispone de hasta 5 dormitorios, además de una terraza exterior de 14 metros cuadrados perfecta para disfrutar del buen tiempo en verano.
Su precio original era de 44.630 euros, pero ahora está en oferta por un precio de 42.582 euros, lo que supone un ahorro de 2.048 euros. Esta oferta es de cara al verano, por lo que el precio podría volver a cambiar en unos meses.
Lo que más destaca de esta casa prefabricada es su capacidad para adaptarse a distintos estilos de vida. Dispone de ventanas amplias y puertas de gran tamaño, que ayudan a que entre con facilidad la luz natural, creando un espacio luminoso y confortable. Además, la casa incluye una versión con aislamiento que mejora su eficiencia energética y confort térmico durante todas las estaciones del año.

Cómo es la casa prefabricada VERA: qué incluye
La casa prefabricada VERA está construida en madera de pino nórdico natural y abeto escandinavo certificado, por lo que la durabilidad y el aislamiento térmico del espacio están asegurados. Su superficie total es de 132 metros cuadrados, a los que se suma un porche cubierto de 13,5 metros cuadrados, perfecto para realizar barbacoas, tomar el sol o llevar a cabo eventos familiares al aire libre.
Los 132 metros cuadrados de vivienda se estructuran en dos plantas, cada una con una serie de habitaciones independientes. En primer lugar, la planta baja dispone de un salón de gran tamaño que conecta directamente con el exterior, a lo que se suma un dormitorio principal amplio pensado para el descanso.
Por su parte, la planta superior tiene entre 2 y 4 dormitorios adicionales, dependiendo de las necesidades del comprador, lo que la convierte en una opción versátil para familias numerosas o quienes deseen contar con habitaciones de invitados, despacho o zona de ocio. La casa se puede adaptar a las necesidades del interesado, en función del fin que quiera darle a cada espacio.

