Las relaciones amorosas en el trabajo ¿puede la empresa prohibir las parejas?

Que se formen parejas estables o esporádicas en los centros de trabajo puede generar rechazo por parte de los empleadores que lo ven como un peligro para el buen desempeño laboral pero ¿es legal no permitirlas y sancionar por este motivo?

Dos compañeros de trabajo en una relación amorosa
Las relaciones amorosas en el trabajo ¿puede la empresa prohibir las parejas?
Fernanda Lencina

Las relaciones amorosas dentro del ámbito laboral pueden ser motivo de conflicto entre la pareja y las empresas. En algunos casos, estas útimas prohíben las relaciones sentimentales entre los empleados, pero la duda es si realmente, desde el punto de vista legal, estas situaciones pueden evitarse a base de sanciones o reglas que las impidan.

Un 14% de los trabajadores, según un informe de Infojobs, declara tener o haber tenido una relación sentimental con una persona de su entorno laboral en el último año. Algo que no sorprende si se tiene en cuenta que un empleado pasa más horas del día en el lugar de trabajo que en su propia casa y es por eso que algunas empresas intentan ‘controlar’ que se formen parejas. Para aclarar si es legal o no prohibir, controlar o sancionar en estos casos, en NoticiasTrabajo hemos consultado a expertos.

Parejas en el trabajo: legal o no

El lugar de trabajo es un ámbito propicio para las relaciones, que incluso y según un estudio de la Sociedad para la Gestión de Recursos Humanos (SHRM) de EE.UU, de febrero de 2022, podrían haber aumentado en la distancia, durante la pandemia. Más allá de las explicaciones que tienen que ver con los factores psicológicos y sociales que entran en juego en las relaciones amorosas dentro del trabajo, existen dudas y comportamientos de las empresas que tienen que ver con la legalidad.

El especialista en derecho laboral, Ignacio de la Calzada Gonzalezun tío legal”, es tajante al responder si es legal que las empresas pueden prohibir las relaciones entre empleados: “no, no lo es por tratarse de la esfera personal y la intimidad del trabajador, la empresa no puede prohibirlo, pues tampoco estaría justificado en una política de empresa o código de conducta”. De la Calzada compara esta situación al caso de llevar tatuajes, ya que la empresa no puede prohibir a las personas que se los hagan pero “sí puede evitar que los muestre justificando un código de etiqueta”.

Incluso, en el caso de que se le pida al empleado firmar el no tener relaciones amorosas dentro del trabajo como parte de las políticas de la empresa, “cualquier cláusula sería nula de pleno derecho, y se tiene por no puesta, pese a que se haya firmado”, por lo tanto, como no existe no se puede acatar “ y "la consecuencia de dicha transgresión (el despido) podría acarrear la nulidad del despido por vulnerar los derechos fundamentales”.

Las consecuencias del amor en el trabajo

Como se decía anteriormente, la empresa no tiene forma legal de prohibir las relaciones amorosas en el trabajo, pero hay casos en los que puede haber consecuencias, que sí pueden derivar en despido. “Podría darse el caso pero no por el hecho de tener pareja, sino por una situación que pueda haber generado un conflicto de intereses o ruptura de buena fe o transgresión”, aclara Ignacio de la Calzada. Y nos da un ejemplo que tiene que ver con dar ‘ventajas’ a la pareja profesional o favoritismos, pero “en este caso no se estaría sancionando la relación amorosa sino el trato recibido contrario a los intereses de la empresa o sus directrices”.

Relación amorosa entre compañeros de trabajo

Existe otro punto importante a destacar y que podría generar, según el experto, una consecuencia jurídica, como el despido. Y es el mantener una relación sentimental con un proveedor de la empresa, por ejemplo, esto en el caso de que ese servicio sea contratado por ser pareja del empleado y se generaría un conflicto de intereses.

Otros casos sancionables son también los que implican relaciones entre profesores y alumnos, aunque sean solo mensajes amorosos “como el caso de un profesor con una alumna de 14 años, que terminó en despido por dañar la imagen del centro educativo”. (STSJ de Cataluña en de 2014)

Cómo pueden defenderse los empleados

El estudio de Infojobs, anteriormente mencionado, señala que un 73% de las relaciones amorosas se dan entre compañeros de trabajo, mientras que un 14% tienen lugar con responsables de departamentos, y un 8% con subordinados. Por lo que en muchos casos, puede darse la situación en la que las empresas busquen la forma de evitarlas. Pero ¿qué pueden hacer los trabajadores si esto ocurre?

Ignacio de la Calzada responde que “siempre se pueden grabar las conversaciones con los superiores en donde se los ‘amenace con sanciones’ o bien, se les reproche la relación”. Por otro lado, aconseja que si el despido ocurre por estas circunstancias, el trabajador debe acudir a los tribunales.

La existencia de favoritismos, el beneficiar o perjudicar a las personas implicadas en la pareja fruto de una mala relación o evitar futuros conflictos, son las principales causas por las que las empresas prefieren ‘desalentar’ que se formen parejas entre compañeros de trabajo.

Lo más leído

Archivado en: