La baja laboral por ansiedad es la segunda Incapacidad Temporal más frecuente en España. Un hecho que recuerda a las empresas su obligación de velar correctamente por la salud mental de sus trabajadores. Es importante lanzar este aviso porque, generalmente, la Seguridad Social suele remitir este tipo de baja médica por contingencias comunes, pero hay ocasiones en las que pasaría a considerarse accidente de trabajo.
Así lo ratificó una sentencia del Juzgado de lo Social n.º 5 de Madrid, en mayo de 2022, que reconoció como accidente laboral una baja por salud mental de un trabajador, que sufrió un episodio de ansiedad provocado por su ritmo de trabajo. ¿Qué se cumplía en este caso para que la Seguridad Social considerase la baja laboral por ansiedad accidente laboral?
En primer lugar, el episodio de ansiedad tuvo lugar en el centro de trabajo pero, además, fue la actividad laboral a la que estaba sometido el empleado, que no era la adecuada, la que provocó el mismo. En concreto, se acreditó la existencia de un fallo frecuente y constante de la maquinaria, lo que se traducía en una sobrecarga de trabajo a la que no se puso solución, pese a las advertencias del trabajador.
“No estamos ante el estrés normal del trabajo, sino ante un incremento del trabajo y del estrés motivado por un constante fallo de la maquinaria que obliga al demandante a trabajar bajo presión constante”, detallaba la sentencia. Por ello, por petición de la Inspección de Trabajo, la baja laboral pasó a ser de contingencias comunes a accidente laboral, para lo que se hizo también una evaluación de riesgos psicosociales en la empresa, donde 6 de los 9 elementos evaluados tuvieron un resultado negativo. Se demostró la pasividad de la empresa para adoptar medidas.
La inacción de la empresa, clave para que pase a considerarse accidente laboral
En este caso, la abogada que defendió al trabajador explicó que, pese a las advertencias del mismo, y la urgencia de imponer una solución, “la empresa no hizo nada para mitigar los daños”, por lo que “a la vista de este informe, el INSS cambió su criterio en el juicio y se adhirió a la demanda del trabajador”, tal como recogen en el portal ‘Abogacía’.
De aquí se desprende un dato clave: si la empresa, consciente de un problema en el centro o en la dinámica de trabajo, no toma medidas, aun siendo conocedora que provoca una sobrecarga de trabajo a su empleado/a, y que puede derivar en ansiedad o depresión, se podría pasar a considerarse una Incapacidad Temporal por accidente laboral.
Así se vio también el año pasado con la sentencia del Juzgado de lo Social n.º 2 de Pamplona, con la que se consiguió que una incapacidad temporal iniciada como enfermedad común se calificase como accidente de trabajo. En este otro ejemplo, como explicó CSIF, la empleada mostró durante su baja “un cuadro de ansiedad debido a las condiciones laborales estresantes al triplicarse el número de personal y trámites a realizar a su cargo desde el inicio de su relación laboral con la empresa”.
Pese a ello, “en ningún momento se le puso personal de apoyo para hacer frente a esa situación, a pesar de que la empleada había puesto este hecho en conocimiento de los responsables en reiteradas ocasiones”. Pese a los avisos durante un año, y la insistencia a la empresa, no obtuvo respuesta ni solución alguna, lo que le provocó “trastornos del sueño, físicos y alimenticios”, que originaron la baja. Una vez más, la inactividad de la empresa originó que la baja laboral se considerase accidente de trabajo.
Por qué es importante que la baja laboral se reconozca como accidente de trabajo
El reconocimiento de la baja laboral por ansiedad, o similar, como accidente de trabajo, es importante porque pone el ojo en las empresas y en su obligación de velar por la salud mental de sus empleados. Al igual que se hace una evaluación de riesgos por problemas físicos, como puede ser caídas o sobrecargas, también hay que evaluar los psicosociales.
En caso de encontrarse en una situación donde no se están tomando las medidas adecuadas para protegerlos, lo primero que se debe hacer es comunicarlo a la empresa, y es importante hacerlo por escrito (lo más adecuado es vía email), para que haya constancia de dichos avisos. Así será más fácil demostrar la inactividad de la empresa.
Del mismo modo, muchos trabajadores pueden preguntarse que, a efectos de cobrar la ayuda por Incapacidad Temporal, cuál es diferencia entre la baja laboral por contingencias comunes, como generalmente se concede la baja médica por ansiedad, y la baja laboral por contingencias profesionales o accidente laboral. Solo en esta última, se empieza a cobrar la ayuda desde el día siguiente a la baja médica, siendo la cuantía a recibir el equivalente al 75% de nuestra base reguladora.
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