Comprueba si están bien estos conceptos de tu nómina

Los trabajadores tienen derecho a pedir a su empresa que les entreguen todos los meses la nómina (artículo 29 del Estatuto de los Trabajadores). Y deberían hacerlo, porque contiene datos muy importantes que, de no revisarlos, podrían perjudicar al empleado. Es así porque determinados conceptos influyen en el salario que se cobra mes a mes, pero también en la cuantía que se cobrará en la futura pensión de jubilación o, en caso de perder el trabajo, en la prestación contributiva por desempleo (el paro).

En primer lugar, por estar seguros, hay que revisar los datos personales: NIF y número de la Seguridad Social. Una vez que veamos que estén correctos, ya se puede pasar a ver si la empresa nos está pagando lo que debe o nos está pagando menos de lo que nos corresponde. Para ello, hay que comprobar los siguientes conceptos: 

• Comprobar la antigüedad (suele aparecer en el recuadro de arriba). Si la fecha que se muestra no coincide con el primer día que empezamos a trabajar, podrían estar pagándonos menos. Es así porque nos podría corresponder cobrar un plus de antigüedad. 
• Categoría profesional (también suele aparecer arriba). Debemos ver si la categoría que nos tienen asignada corresponde realmente con nuestras funciones. El motivo es que, a mayor categoría, mayor es la retribución. Revisa que no te tengan en una inferior.

Importancia de las bases de cotización para asegurar la pensión

Tampoco hay que dejar de revisar nuestras bases de cotización, porque de ellas depende lo que vamos a cobrar de pensión, por el paro del SEPE o en cualquier otra situación protegida por la Seguridad Social. ¿Por qué? Porque cuanto más altas sean las bases de cotización, más se cobrará en un futuro por estas prestaciones. Por este motivo, debemos ver que siempre concuerden con nuestro salario (en la página web de la Seguridad Social, se puede ver cuáles son las bases mínimas y máximas)

Dichas bases aparecen justo al final de la nómina y muestran la cuantía total que empresa y trabajador pagan a la Seguridad Social en concepto de cotizaciones. Es por eso que, cuánto más paguemos, más podremos cobrar en un futuro en la pensión de jubilación; en la pensión de incapacidad permanente; en la prestación por desempleo (paro); en la incapacidad temporal (baja laboral); o en la prestación por nacimiento y cuidado del menor (baja de maternidad y paternidad).

Entender el salario

En último lugar, conviene entender cuál es la cantidad final que percibimos por nuestro salario. Los trabajadores cuentan con un salario en euros brutos, al que hay que descontarle las deducciones por el IRPF y las cotizaciones a la Seguridad Social. Una vez libre de impuestos, lo que queda es lo que realmente cobramos al mes, que es nuestro salario en euros netos. Por ello, el sueldo bruto siempre será mayor que el neto, pero es este último el que representa el importe que vamos a cobrar de manera mensual.