El acceso a la vivienda se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los españoles. Los altos precios, tanto de compra como del alquiler, hacen que la vivienda se haya convertido en un bien de lujo para buena parte de la población, sobre todo para colectivos vulnerables, como pueden ser las personas con discapacidad. De todas formas, y al igual que existen ayudas para adquirir una casa, también las hay por parte del Gobierno para reformar un hogar destinado a estas personas.
Estas ayudas forman parte del Plan Estatal de Vivienda 2022-2025, aprobado mediante el Real Decreto 903/2022 del 22 de octubre y diseñado para facilitar el acceso a viviendas adaptadas y promover la inclusión de este colectivo. Estas pueden cubrir hasta el 50% de la renta mensual del alquiler, ofreciendo un apoyo significativo para las personas con discapacidad.
Pueden solicitar ayudas para la adaptación y accesibilidad
Una de las ayudas que consiguen una mayor accesibilidad para adaptar la vivienda a las personas con discapacidad, es la que cubre hasta el 80% del presupuesto de la obra, con un máximo de 18.000 euros por domicilio. La misma está englobada a las viviendas de las personas mayores, con discapacidad igual o mayor al 33% o en situación de vulnerabilidad
Hablamos de que en España, más de cuatro millones de personas viven con algún tipo de discapacidad física, sensorial o psíquica, de acuerdo con los últimos informes del Observatorio Estatal de la Discapacidad. Este importante colectivo se enfrenta a barreras cotidianas que van más allá de las dificultades habituales en el mercado de la vivienda, tales como la accesibilidad dentro de sus hogares o la ubicación de los mismos en entornos adaptados a sus necesidades específicas.
Aquí es donde se suelen establecer unas cuantías máximas dependiendo del concepto. Por ejemplo, en Asturias el importe límite para la adaptación de los baños será de 2.000 euros, mientras que para instalar unas puertas adecuadas el máximo es de 1.500 euros. O en País Vasco, donde el máximo a percibir para adaptar el baño se sitúa en los 6.000 euros.
Instalación de rampas y ascensores, baños o cocinas adaptadas
En este sentido, ayudas como estas del Gobierno son las que cubren una amplia gama de intervenciones, desde la instalación de rampas y ascensores hasta la adaptación de baños y cocinas. Sí es cierto que dependiendo de la comunidad autónoma en la que se resida estas cuantías pueden ser mayores o menores. Esto, porque cada administración tiene su propio programa de ayudas para la rehabilitación de edificios y mejora de la accesibilidad.
Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid tiene vigente su Plan Adapta Madrid 2025, destinado a fomentar la adaptación de viviendas y locales situados en planta baja para personas con discapacidad y enfermedades raras. En su caso, la iniciativa permite cubrir entre el 40% y el 90% del coste de las obras.
Mientras que en Andalucía, las ayudas que existen tienen cuantías que varían según el tipo de vivienda y la discapacidad reconocida. Para viviendas unifamiliares, la cuantía máxima puede ser de 12.500 euros, pudiendo aumentar a 15.000 o 18.000 euros, en función del grado de discapacidad.
Otras comunidades, como Cataluña, Aragón y la Comunidad Valenciana, también han habilitado subvenciones específicas para mejorar la accesibilidad en viviendas particulares. En Cataluña, existen programas para el cambio de bañera por ducha y la adaptación funcional del hogar. Aragón impulsa ayudas destinadas a eliminar barreras arquitectónicas en viviendas de personas mayores y con discapacidad. Y en Valencia se promueven subvenciones para la adecuación de viviendas y la promoción de la autonomía personal.
Requisitos a cumplir
Estas ayudas podrán estar destinadas tanto a mejorar la accesibilidad general de urbanizaciones, con la instalación de rampas, ascensores, salvaescaleras o automatismos de aperturas, hasta más concretos, como la instalación de grúas o domótica dentro de las viviendas.
La cuantía máxima que se establece para ayudar a la accesibilidad de las viviendas son de hasta 18.000 euros si en ellas reside una persona con discapacidad severa.
En líneas generales casi todas las regiones exigen los mismos requisitos para que podamos acogernos a estas ayudas, como las siguientes:
- Contar con un grado de minusvalía igual o superior al 33% y que superen el baremo de movilidad reducida. Una valoración que tendrán que realizar los servicios correspondientes.
- Acreditar la residencia legal y el domicilio durante al menos cinco años en la comunidad en la que vamos a pedir la ayuda.
- La ayuda debe solicitarse para la vivienda habitual y en la que conste el empadronamiento de la persona con discapacidad. Por lo tanto, estas ayudas no tienen por cometido ayudarnos a adaptar una casa donde únicamente pasamos las vacaciones.
- No haberse beneficiado de unas ayudas similares en los cinco años anteriores a la petición de esta ayuda económica.
- Tener una renta individual o per cápita familiar inferior al triple del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) para el ejercicio anterior al de la convocatoria.
