El Gobierno negocia limitar un 3% el alquiler hasta que Economía fije un tope de precios a la ley de vivienda

El Gobierno de España estudia la forma de establecer para 2024 el límite al alquiler en el 3% para posteriormente negociar y definir otro nuevo índice definitivo en 2025. El tope a la subida de los arrendamientos de vivienda, que actualmente y hasta finales de año se encuentra limitado al 2% desde marzo del pasado año como medida anticrisis, es uno de los grandes lastres para que la próxima Ley de la Vivienda salga adelante.

El otro aspecto que mantiene en la nevera a la nueva legislación, como otras como el Estatuto del Becario, qué hacer con los pisos que entran nuevos en el mercado, cómo ponerles algún límite para evitar que presionen hacia arriba en los precios. Aunque primero debe alcanzarse el consenso sobre los nuevos techos de subida permitida del alquiler, con el Ejecutivo tratando de ganarse el visto bueno de ERC y Bildu para ubicarla como broche final a la actual legislatura antes de las próximas elecciones.

La propuesta del ala socialista del Gobierno se basa en incrementar a ese 3% el límite de las posibles subidas al alquiler para examinar un nuevo método para elaborar el nuevo tope a las revisiones de la renta a partir de 2024. Bildu y ERC ya han mandado sus propuestas, a las que ahora le toca contra programar al Ejecutivo en un asunto que prometió a la Comisión Europea zanjar este año.

Nuevo límite a la subida del alquiler

La reticencia de Unidas Podemos a esta iniciativa, que considera que ligar los topes al alquiler al IPC ya no sirve, complica la negociación. Sin embargo, la formación de Ione Belarra se ha plegado a aceptar ese 3% de forma temporal, aunque su condición es la de fijar un índice permanente y no que vaya moderándose según distintos factores.

La propuesta, que aún está en fase de definición, se basa en usar datos fiscales o las fianzas de los alquileres que los caseros deben depositar en el organismo autonómico correspondiente. De momento, se ha considerado como viable, aunque está abierta a cambios. También existen discrepancias sobre cómo limitar los precios del alquiler, más allá de la actualización de las rentas anuales.

Se baraja, al respecto, compaginar las deducciones fiscales, mezclando el abaratamiento de las casas (la opción defendida por el PSOE), reservadas a los caseros particulares, con topes de precios marcados por la Administración (la propuesta de Podemos) que se aplicarán a los grandes propietarios. Además de tomar como referencia contratos anteriores de esos arrendatarios para regular los pisos que salen al alquiler por primera vez en esas zonas tensionadas.

¿Pueden subirme el alquiler?

El casero no podrá subir el precio del alquiler más de un 2%, al menos, hasta el próximo 31 de diciembre de 2023. Una vez se cumpla la anualidad de un contrato, arrendatario y arrendador podrán negociar la nueva renta en concepto de ese alquiler, pero si no existe acuerdo, la subida no podrá superar ese 2% que establece el Índice de Garantía de Competitividad.

La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) que actualizó el Gobierno de Mariano Rajoy establece que el utilizado será el Índice de Garantía de la Competitividad (IGC), por el desbordamiento del IPC por la inflación.