Todos los cambios que va a hacer pronto el Gobierno en los subsidios por desempleo

El primer enfrentamiento del nuevo Gobierno se está batiendo en un campo inesperado: los subsidios por desempleo. Los Ministerios de Trabajo y Economía están trabajando en una reforma de estas ayudas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) pero, al parecer, el único punto en común en el que estarían aparentemente de acuerdo es en la unificación de los subsidios en una única ayuda. A partir de aquí, el planteamiento entre un ministerio y otro sería diferente.

Por un lado, el Ministerio de Trabajo y Economía Social, liderado por Yolanda Díaz, está elaborando un borrador sobre la reforma del subsidio mediante el que aplicaría dos grandes cambios: acabar con el mes de espera para cobrarlo y ampliar la cobertura a los parados mayores de 45 años sin cargas familiares, tal como han informado fuentes de esta cartera ministerial a Europa Press. 

En este sentido, hay que recordar que, actualmente, para poder cobrar el subsidio por desempleo, los beneficiarios deben cumplir con el “mes de carencia”. Es decir, después de agotar la prestación contributiva por desempleo (el paro), tienen que esperar un mes para solicitar el subsidio. Lo que pretendería Yolanda Díaz es acabar con este periodo de espera y que el cobro de esta ayuda pueda ser inmediato. 

No son las únicas novedades que busca implantar Díaz. En primer lugar, pretende que las revisiones del subsidio pasen a ser trimestrales. Ahora mismo, los subsidios se renuevan cada seis meses, a excepción del de mayores de 52 años que se hace de forma anual, con la presentación de la declaración anual de rentas al SEPE. 

A esto se le sumaría la posibilidad de compatibilizar la ayuda con un trabajo durante el primer mes, incluso a tiempo completo, y el derecho de sus beneficiarios a acceder a una “cartera de servicios” que se acordarán con las oficinas de empleo. Entre ellos se encontrarían itinerarios formativos y laborales adecuados a cada perfil y situación personal. Unos cambios que, aseguran las mismas fuentes, se está trabajando para que se lleven al Consejo de Ministros “lo antes posible”. Aunque la reforma encuentra discrepancias con el Ministerio de Economía.

Propuesta de Economía: disminuir la cuantía del subsidio con el paso del tiempo

Desde el Ministerio de Economía, liderado por Nadia Calviño, se estaría gestando una reforma del subsidio algo diferente a la de Trabajo. Tal como expresó el secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Gonzalo García Andrés, esta misma semana, quieren modificar el cobro de estas ayudas. En concreto, la cuantía pasaría a ser gradual: al principio sería más alta, y, por tanto, se cobraría más, y después iría disminuyendo con el paso de los meses. No obstante, la cantidad total percibida sería la misma, solo que se percibiría de forma diferente con el objetivo de fomentar la búsqueda de empleo.

Yolanda Díaz se ha mostrado molesta con estas declaraciones, declarando esta misma mañana, a las puertas del Congreso, que la reforma de los subsidios es “competencia del Ministerio de Trabajo y Economía Social” y, por tanto, de la vicepresidenta segunda (es decir, que son de su competencia”. 

Ante los medios, ha manifestado su “absoluta disconformidad” con las declaraciones del secretario sobre que esta reforma va a “potenciar” el compromiso de actividad para la búsqueda y aceptación del empleo de las personas desempleadas. En este sentido, García explicó que se buscaba aumentar la vigilancia para verificar que se cumple el “compromiso de actividad” que firman los beneficiarios del subsidio, a la vez que se quería brindar un apoyo mayor al parado, tanto para formarlo como para orientarlo. 

“Les garantizo a los trabajadores de nuestro país que desde esta vicepresidencia no vamos a propiciar ningún recorte en materia de subsidio por desempleo. Muy al revés, la reforma legislativa que hemos planteado tiene que ver con ganar derechos, tiene que ver con la ampliación de las subjetividades en el subsidio por desempleo”, repetía Díaz, volviendo a reiterar que “no compartimos en absoluto la propuesta que se está formulando desde Economía”. En cambio, Calviño sí que manifiesta que ministerio está “alineado” con Trabajo, aunque no habrían hecho más hincapié en la posibilidad de cobrar los subsidios de forma gradual.

Sindicatos y patronal, pendientes a la reforma

Las discrepancias entre Trabajo y Economía deberán de resolverse pronto, ya que esta reforma está comprometida en el Plan de Recuperación y debe salir adelante para que el Gobierno reciba el cuarto pago de los fondos europeos. Por este motivo, desde el Ejecutivo buscan cerrarla en las próximas semanas. 

Sobre la misma, también se han manifestado patronal y sindicatos. Empezando por estos últimos, los sindicatos mostraron su “sorpresa” ante las declaraciones del secretario de Economía, mostrando su rechazo a reforzar el seguimiento a los desempleados para que busquen empleo y acepten ofertas de trabajo. 

En este sentido, CCOO y UGT han defendido que “queda fuera de toda duda que, ante un empleo digno, que se ajuste a la normativa laboral, ninguna persona optaría por malvivir con 480 euros mensuales (como máximo) y rechazaría este empleo”. Así, coincidirían con Yolanda Díaz, aunque han pedido que se convoque a los agentes sociales para negociar estas ayudas asistenciales, pidiendo “que protejan a más personas y en mejores condiciones”.

El presidente de la patronal, Antonio Garamendi, se ha mostrado a favor de compatibilizar el subsidio con un empleo, pero también cree que la CEOE tiene un papel importante en la reforma del subsidio. Al hilo, ha manifestado que su desarrollo no depende exclusivamente de Trabajo, como defiende Díaz, sino también de Economía, la patronal y los sindicatos. Por ello, también aboga por llevar su desarrollo a la mesa del diálogo social, expresando que las políticas activas de empleo “no funcionan”. 

A su parecer, es necesario “explorar” distintas propuestas para incorporar a las personas desempleadas al mundo laboral. Abogando por el diálogo social, explica que “a nosotros todavía no nos la han trasladado [la reforma] y siempre suelo decir que a nosotros nos gusta contestar cuando tengamos los papeles en la mesa”. Ha concluido diciendo que incorporar a los desempleados al mundo laboral es un tema “a tratar” y “muy interesante de trabajar”.